La SD Huesca sigue haciendo aguas y hoy se lleva un severo correctivo de un recién ascendido como el Burgos. Partido pésimo sin paliativos de los azulgranas, que desperdiciaron la ventaja inicial y no supieron agarrar a un equipo mucho menos potente.
La actitud de los jugadores, el planteamiento, los revulsivos y todo lo demás falló. Ahora un Huesca en tierra de nadie se queda a la misma distancia del playoff que del descenso.
Ambriz (1) Ultimátum. Los resultados podían tapar los primeros acordes de lo que hoy suena como un réquiem con toques de ranchera. El Huesca jugó fatal ante el Burgos, igual que ante Málaga y Girona, pero la fortuna en esas ocasiones cayó de su parte. El equipo de Nacho areció de identidad, no hubo ninguna mejoría desde el banquillo ni se supo como hacer para parar la avalancha de dominio local.
Andrés (3) Borrón. Todo lo que dio otras jornadas no lo supo dar hoy. Falló de manera grosera en el primer gol, ni se tiró a por el segundo y estaba vendido en el tercero.
Ratiu (4’5) Correcaminos. Pese a sus imprecisiones, malos centros y poco rigor defensivo, no fue de lo peor del equipo. Sumó mucho en ataque, le echó ganas y creó arriba. Pese a ello, su número de pérdidas de posesión (21) y su poca efectividad en el centro (20%) son cifras muy duras para el lateral de un equipo que pretende ascender.
Ignasi (3’5) Inseguro. Casi sorprendió un duelo en el que fue fuerte abajo en la primera mitad y llega tarde a la cobertura en uno de los goles, pero estadísticamente no cuajó mal partido. Pese a haber ganado 10/14 duelos, sigue dejando la sensación de que es un defensa al que se le hace daño demasiado fácilmente.
Pulido (4) Desesperado. Se sumó al ataque muchas veces, dio la asistencia a Cristian y perdió menos balón que Ignasi, aunque tampoco tuvo mucho protagonismo.
Florian Miguel (2’5) Paupérrimo. Pésimo partido del lateral francés. 15 pérdidas de posesión, 85% de duelos perdidos, 0/3 cambios de banda, 0/2 regates y, pese a todo ello, la sensación de haber pasado desapercibido en el partido. Fue una sangría silenciosa para el Huesca y un regalo progresivo para el Burgos.
Mosquera (3’5) Lentitud. Sin hacer muy mal partido, sus características son opuestas a las que necesita el centro del campo de un equipo que pretende jugar como plantea Ambriz. A la contra no suma casi y ni siquiera aseguró la posesión.
Salvador (5) Necesario. Su partido fue potable, con buenos números defensivos, buenas carreras y un gol de jugador que tiene ganas de buscar algo para su equipo. Ganó varios duelos y estuvo acertado en el pase.
Nwakali (2’5) Caos. No ha estado cómodo, no ha entrado en juego y no ha sido diferencial desde la media punta. Sobraba mucho más en el centro del campo que Salvador.
Pitta (3) Invisible. No ha jugado nada. Estorbó los ataques, controló mal casi todas las veces y no sumó casi en ataque durante los primeros 30′. Tiró una contra clarísima y su mejor ocasión llegó al borde del descanso rematando un córner.
Enzo Lombardo (2) Desnivelado. Mala primera parte, mucha pérdida de balón y ningún protagonismo. En la segunda comenzó aparentando algo más de activación en un par de acciones aisladas, pero no maquillan su pésimo partido. Parece que se le quede grande la categoría.
Marc Mateu (4) Repetitivo. Es una constante que se agota partido a partido porque la categoría le conoce cada vez mejor. Le echó ganas y centró varias veces, pero sin la precisión ni la mordiente de otros partidos.
LOS CAMBIOS
Seoane (4’5) Impotente. Él solo no puede hacer todo en un centro del campo que se cae por su propio peso.
Juan Carlos (2’5) Resta. No supo hacer una falta para evitar un gol ni aportar nada como revulsivo. Gozó de más minutos que casi todos los demás pero ni así. En más de media hora dio tantos pasos como veces perdió el esférico: 4.
Escriche (SC) Desesperado. Salió a intentar remar a contracorriente pero con ganas y 15 minutos no le dio para poder hacerlo.
Gaich (SC) Espectador. Salió a rematar balones colgados y solo tocó dos balones, ambos fuera del área: un pase y un intento de regate que no salió. Su rendimiento está siendo muy malo pero tampoco le han llegado balones