La SD Huesca sigue navegando sin timón por la segunda división y rescata un punto ante un Fuenlabrada que buscó más, tiró más y se vio capaz casi en todo el encuentro de doblegar al conjunto local.
Con 1 punto de los últimos 12 posibles, los de Ambriz generan muchísimas dudas entre la afición. Los resultados no llegan, el juego no se parece en nada al de las primeras victorias y muchos comienzan a cuestionar la plantilla y las aspiraciones de un grupo que, a día de hoy, está mucho más cerca en puntos y sensaciones de la zona baja que del playoff.
Ambriz (3’5) Duda. Hoy era el día ideal para resarcirse y, en lugar de ello, el técnico mejicano sigue sembrando vientos que pueden transformarse en terribles tempestades. Hoy sí agotó los cambios y logró manejar tramos del choque, pero sus jugadores no parecen ejecutar sus ideas con precisión. La transición defensiva sigue siendo un aspecto a mejorar.
MVP | Andrés (8) Salvador. Hoy sí paró lo que tenía que parar y alguna más. Sacó 4 ocasiones muy claras del Fuenlabrada para sostener al Huesca ante la tempestad visitante.
Ratiu (5) Justo. Sin tener errores de bulto como Buffarini, tampoco fue ninguna maravilla. Fallón en el pase en corto, fue un desastre en la creación (24 pérdidas de posesión) y los centros (0 de los 5 que intentó llegaron a un compañero.
Ignasi (6’5) Agobiado. Tuvo mucho trabajo hoy, más del que le hubiera gustado, pero respondió bien. Sin mucho ruido, como la pasada jornada, apagó los fuegos con los que se iba encontrando. 4 despejes, 2 tiros bloqueados y 3 intercepciones que le convirtieron en el mejor defensa del equipo.
Pulido (6) Cauto. Con menos revoluciones que hace dos jornadas, el capitán también sostuvo al equipo en los peores momentos. No tuvo tanto protagonismo como Ignasi pero no falló.
Marc Mateu (6’5) Pérdida. Pese a ser uno de los mejores del equipo, en el lateral suma menos. Llega menos y cuando lo hace, o deja un gran hueco u obliga a un centrocampista a retrasarse mucho.
Seoane (4) Triste. Ya no es el que era las primeras jornadas. El equipo oscense se ha venido a menos de su mano y hoy, con errores graves en salida y poco protagonismo ofensivo, ha estado casi irreconocible.
Mikel Rico (3’5) Insuficiente. Con su nivel actual no le da para ser titular en un equipo de grandes aspiraciones, a día de hoy. Cada vez tiene menos protagonismo en el juego.
Nwakali (6) Positivo. Si hay algo bueno en el centro del campo de hoy son sus minutos. Hoy, como titular, sumó fluidez, calidad e ideas cuando a todos los demás se les nublaba el horizonte. Le falta precisión pero el proyecto de jugador que es el nigeriano pude sumar mucho.
Ferreiro (6’5) Distinto. Es el único jugador con diferentes registros, desparpajo y constancia como para ser titular indiscutible arriba. Hoy rozó el gol pero no fue suficiente.
Escriche (5’5) Incómodo. Como Mateu, fuera de posición perdió protagonismo. Lo intentó pero pese a su buen momento personal no supo sumar al ataque.
Pitta (6’5) Proyecto. Hoy, con más tiempo, se vio lo que puede llegar a ser un jugador interesante para el conjunto azulgrana. Con más movilidad y entendiéndose mejor con sus compañeros, rozó incluso el gol.
LOS CAMBIOS
Gaich (2) Terrible. Salió para estar 25′ en el campo, tocar solo 7 balones e irse expulsado por una segunda amarilla de libro. Mucho tiene que mejorar su rendimiento e imagen para que el delantero argentino llegue a ser algo de lo que estaba llamado a ser.
Juan Carlos (4) Inocuo. Por mucho que lo intente, sus capacidades y lo que necesita el equipo están muy lejos de coincidir. Por eso sale, intenta cosas, le echa carácter y, pese a todo, no consigue sumar ni una sola ocasión.
Joquín (5’5) Garra. El joven extremo tiene ganas de sumar pero hoy no se dio. Sus partidos como titular fueron buenos y no se entiende que Ambriz le haya dejado de dar oportunidades.
Florian (5) Espectador. Otro que, como Gaich, no supo entrar en el partido. 8 toques de balón en 20 minutos, ninguna subida por banda y poca aportación.
Mosquera (SC) Cierre. Fue el último en entrar para dejar al equipo sin delanteros, buscando aferrarse con uñas y dientes al empate.