Gabi Torralba pedalea entre la incertidumbre. El coronavirus también se ha cebado con el calendario de las Enduro World Series y no hay nada seguro. Este 2020 será complicado. De entrada, dos pretemporadas para sus piernas y para su cabeza. La primera, antes de que el coronavirus fuera el epicentro de la vida; la segunda, en previsión de que el circuito se retome en el último trimestre del año. Su gran objetivo es acabar este 20202 como campeón de Europa de la especialidad, pero ahora todo se sumerge en la incertidumbre.
El hoy de Gabi Torralba es entrenar en Riglos, en su casa. Llegó a ella desde Portugal. En Lousa estuvo del 7 al 8 de marzo testando un montón de material. Mucho entrenamiento, cronometrajes, probó en su Orbea material de Fox… Una puesta a punto para lo que iba a ser la inminente temporada. Apareció la COVID-19 y el 13 de marzo ya estaba confinado en Riglos. El rodillo fue su amigo y su casa el gimnasio. “He podido salir al jardín y entrenar allí. En casa tengo algo de pesas, un banco, cosas para que no perdiera la forma”, cuenta Torralba que, al menos, tuvo como vistas los Mallos y eso siempre es de agradecer.
Y a sus 23 años mantener la forma cuesta, aunque parezca mentira. No se puede decir que no se metiera buenas palizas. Días de hora y media de rodillo más musculación; otros de dobles sesiones. Todo para seguir fuerte. Para mantener, por ejemplo, pulsaciones medias de 160 durante cuatro horas y máximas de 188 cuando ya ha podido salir por el Reino de los Mallos y firmando desniveles de 2.400 metros.
Todo sacrificio parece poco cuando tu objetivo es ser competitivo en el duro mundo de las Enduro World Series y tu reto para este año es ser campeón de Europa. Eso sí, insiste en la incertidumbre que provoca el carecer de un calendario fijo. Cuando entrenas sin un horizonte claro todo se complica más para la puesta a punto y el riesgo de “quemarte” está allí. La receta para evitarlo no es otra que disfrutar. “Ahora hago las rutas que me parecen porque no sabes cuándo se va a poder competir”, matiza Torralba.
La Enduro World Series consta de 9 pruebas y cuatro han sido canceladas. Por su parte, el circuito europeo analiza la posibilidad de que sus siete carreras se celebren entre septiembre y noviembre lo que supondrá un desgaste tremendo para los biker. Cerradas las pruebas de Italia, Estados Unidos y Canadá de las EWS, la de Eslovenia aplazada a octubre como la de Francia, la primera prueba podría la de Zermatt (Suiza), en septiembre. Después, la previsión es disputar el Trofeo de las Naciones en ese mes, dos rondas de EWS en octubre y en noviembre, Chile y Colombia. “Algo correremos, eso seguro, pero no sé cuáles”, señala Torralba.
