Míchel ha elogiado al Cádiz, próximo rival del Huesca. El partido llega ya, mañana. El equipo altoaragonés entra en seis días frenéticos. Primero, el líder. Luego el Zaragoza. Y Raba no estará seguro contra los gaditanos y es duda para el derbi. La razón descansa en una lesión muscular. Problemas en el músculo semimembranoso de la pierna derecha. Eso sí, según el comunicado del club, el pronóstico es leve.
La visita del líder hubiera sido otra con un Alcoraz lleno, pero toca afrontarla sin el apoyo de la grada y con las dudas generadas por el equipo tras la reanudación de la competición. Míchel ha elogiado así al Cádiz que llega a Huesca: “Es el mejor equipo de la categoría. Ha demostrado que es el que mejor hace las cosas. Tiene una manera de jugar muy identificada y lo hace a la perfección”.
El técnico asume que el Cádiz les va a exigir 95 minutos de trabajo. Sabe que penaliza cualquier error del contrario por lo que el Huesca tiene que ser capaz de dominar un encuentro consciente, además, de que “vamos a sufrir en determinados momentos”. El once que planteará Míchel no estará condicionado por lo sucedido en la última jornada. El madrileño defiende que “teniendo alternativas no vamos a forzar a nadie” y que el estado físico de la plantilla “es bueno”.
Míchel es consciente de la importancia de los tres puntos en juego con el Cádiz. Reconoce que es una “final”, aunque con “matices”, porque también hay otros resultados en juego. Aplica la presión de que el equipo “sabe que nos jugamos mucho mañana” y sabe que tiene que dar “un golpe encima de la mesa”. El preparador del Huesca reconoció que le gustaría estar “en los dos primeros puestos de la clasificación”, pero no lo dijo para echar sal sobre la herida porque enseguida matizó que “estamos donde estamos porque también hemos hecho bien las cosas”.