Tras el pitido final del empate ante el Getafe, algunos futbolistas de la SD Huesca se lamentaban de la ocasión perdida, lo que deja a las claras la tremenda ambición del equipo azulgrana.
Si algo dejó el partido del sábado entre la SD Huesca y el Getafe es la tremenda igualdad y lo caro que va a estar entrar este año en ‘playoff’. Ya no tanto por los puntos necesarios, sino porque cada partido que resta de aquí a final de temporada va a exigir ser un equipo tremendamente competitivo, sin fisuras y muy ambicioso. La SD Huesca de Juan Antonio Anquela aunó el pasado sábado todos estos calificativos.
Cinco puntos son los que separan a todos los integrantes de la zona de ‘playoff’. La SD Huesca, el quinto en discordia para esos cuatro billetes, puede dar algún susto si alguno de estos se relaja. Hasta la fecha, del cuarteto que precede a los oscenses, tan sólo el Cádiz ha sido el único equipo capaz de doblegar al conjunto de Anquela esta temporada, merced al 1-0 conseguido en el Carranza, donde los azulgranas no fueron inferiores llegando a malograr un penalti cuando el electrónico reflejaba un 0-0.
Los empates contra el Getafe, tanto en la ida (1-1) como en la vuelta (0-0), y Tenerife (1-1) en la ida, reflejan las pocas diferencias existentes entre todos estos conjuntos. Los de Anquela, por el contrario, doblegaron al Real Oviedo (4-0) en una de las primeras partes más completas que se recuerdan en Camino Cocorón.
Ambición, competitividad y humildad son las principales características de los azulgranas esta temporada, donde salvo contadas ocasiones, han demostrado que son un equipo tremendamente difícil de doblegar, exigiendo a los rivales en cada partido una concentración y un alto ritmo físico. En una temporada donde los objetivos podrían llevar a la complacencia, el equipo quiere más. Diez jornadas son muchas y más en una categoría donde cualquier resultado tiene cabida, donde cuesta tanto o más ganar a un equipo de descenso que de ‘playoff’.
Pero si algo podemos extraer del partido del sábado es que el equipo de Anquela tiene mimbres futbolísticos, tácticos y físicos para pelear por un sueño que, visto lo visto cada jornada, tiene pinta de casi realidad. Ahora comienza la verdadera Liga para todos los equipos. El conjunto azulgrana tendrá una auténtica prueba de fuego en estas últimas 10 jornadas.
Equipos como Cádiz, Rayo, Tenerife, Lugo y Numancia todavía deben visitar El Alcoraz. Por el contrario, los oscenses deberán visitar a Reus, Oviedo, Girona, UCAM Murcia y al intratable Levante -última jornada- en un ‘sprint’ final que va a necesitar de mucha calma y fortaleza mental.