ZARAGOZA | La estrepitosa caída ante la UD Atzeneta en Copa del Rey y la deplorable derrota ante la SD Huesca en el derbi aragonés terminaron por sentenciar a un Fran Escribá que estaba en el alambre tras una larga racha de partidos sin conseguir los 3 puntos. El técnico valenciano es cosa del pasado y el equipo ya está a las órdenes de Julio Velázquez, quien se sentará en el banquillo del Real Zaragoza por primera vez ante el Albacete.
El ex del Villarreal CF, Real Betis o Deportivo Alavés entre otros aterriza en la entidad presidida por Jorge Mas con la misión de dar vida a una plantilla que parece muerta. Por lo tanto, el salamantino tendrá que hacer gala de su virtud más destacada en un nuevo proyecto profesional: tendrá que poner a prueba y exhibir su faceta como motivador y como agitador. Su primera prueba será asequible a pesar de hacerlo fuera de su casa, concretamente en el estadio Carlos Belmonte.
Sin duda, una buena oportunidad para empezar con buen pie esta nueva etapa del Real Zaragoza. Los manchegos se encuentran a tan solo dos puntos de los puestos de descenso y -como los aragoneses- llevan 8 encuentros sin ganar, incluyendo la elimincación copera ante un rival de menor categoría. Sin embargo, el choque no será fácil. Y más teniendo en cuenta que el Real Zaragoza no gana en su estadio desde la temporada 2015/2016 con Ranko Popovic en el banquillo.
Además de estar los tres puntos en juego, este duelo servirá como puesta en escena de un nuevo proyecto que empieza a andar. 90 minutos en las que podremos ver las primeras pinceladas de un equipo comandado por Julio Velázquez y que valdrán como termómetro de lo que puede ser un nuevo comienzo -aunque en noviembre- del Real Zaragoza. Toda la parroquia zaragocista estará pendiente e ilusionada de lo que esperan que sea el inicio de un largo camino hacia la lucha por el ansiado ascenso.