Álvaro Fernández aterrizó en las últimas horas a la ciudad alto-aragonesa tras conseguir otra clasificación histórica. El guardameta azulgrana fue partícipe del logro conseguido por la Selección Española Sub 21. El meta del conjunto oscense analizó el choque frente al Real Valladolid. Álvaro también fue preguntado sobre la situación de la plantilla, las sensaciones y la sana competencia que existe en la portería de la SD Huesca.
Comenzó agradeciendo la confianza que la selección nacional ha depositado en él. «Estoy feliz por los 90 minutos, la portería a cero y sobre todo por la clasificación», afirmaba. Definió como «muy importante» la oportunidad que le brindó la Selección Española para volver a coger sensaciones, tras no poder participar, hasta ahora, con su equipo en La Liga Santander.
Además, Álvaro habló sobre la situación deportiva que vive la SD Huesca tras cinco jornadas disputadas. Afirmó que los oscenses merecen más puntos de los que se han cosechado. También introdujo que si el grupo sigue mostrando las mismas sensaciones, los resultados positivos llegarán más pronto que tarde. «Podríamos tener perfectamente tres o cuatro puntos más», asintió.
Asimismo, Álvaro habló sobre el próximo encuentro en el feudo oscense. Resulta acuciante sacar cuanto antes los tres puntos. No obstante, declaró que el encuentro del domingo en El Alcoraz no puede ser una final, tratándose así de la sexta jornada de campeonato. No obstante, comentó que posiblemente los pucelanos cuenten con el mismo objetivo que los aragoneses. «Es un partido de tres puntos, de reconvertir las sensaciones en victoria y de poder avanzar en la clasificación», analizaba.
El gran dilema
La SD Huesca tiene una gran dilema en la portería y culpa la tiene la sana competencia entre Álvaro y Andrés Fernández. El arquero riojano declaró que entre ambos porteros hay un «buen feeling». Pese a que Andrés lo ha jugado todo hasta el día de hoy, afirmó que la relación es muy buena y que la portería de la SD Huesca está bien cubierta.
El otro siempre va a estar ahí para apoyarle, para trabajar fuerte, para motivar al otro y defender la portería.