Hablar de Álvaro Ratón es hablar de un portero en la sombra. Un futbolista testimonial, cuya función parece ser la de completar convocatorias y esperar pacientemente el momento de vendarse las muñecas y ponerse los guantes. Sin embargo, esto no siempre ha sido así.
Corría la temporada 2015/16, y el Real Zaragoza, ya asentado -desgraciadamente- en la segunda categoría del fútbol español, se fijaba en uno de los porteros del Deportivo Aragón: un gallego de 1,91 metros de altura que sorprendía a propios y extraños por conseguir ser el segundo guardameta menos goleado de los 451 equipos que participaban en Primera y Segunda División. Sí, empatado con Bussmann (portero por entonces del Caudal Deportivo), solo era superado por un desconocidísimo Keylor Navas, indiscutible con el Real Madrid.
Sus 2 goles encajados en las primeras 11 fechas ligueras y sus buenos números hicieron que Álvaro Ratón subiese al primer equipo la siguiente campaña. Debido a la mala temporada de Xabier Irureta y la baja forma de Saja, compartió portería con los dos cancerberos jugando en total 19 partidos de liga. Y desde entonces…
El resultado lo sabemos todos. La llegada de Cristian Álvarez sorprendió por su retiro en Argentina, y por el nivel que demostró desde que se puso los guantes. Factor que resultó en que el bueno de Ratón comenzase una larga travesía en el banquillo durante todos estos años.
Ya sea por mérito del Rosarino, o por demérito del gallego, lo cierto es que Álvaro ha tenido una aportación testimonial en el club. Siempre correcto en sus declaraciones, nunca ha levantado la voz ni ha pedido más de lo que deportivamente se merecía. Pero no ha logrado hacer competencia a Cristian. De hecho, La Romareda nunca lo ha visto como relevo para cuando las fuerzas del argentino se vean poco a poco mermadas.
En sus inicios, Ratón se describía como trabajador. Sin embargo, ese trabajo silencioso no le ha llevado a hacerse con la Puerta del Carmen. Desde su debut el gallego ha disputado 65 partidos oficiales con el Real Zaragoza, 51 en liga y 14 en Copa del Rey. Encajando 75 goles en total.
En el área no se le puede considerar un virtuoso de la posición. Le falta convicción en el juego aéreo, dudando mucho en la salida a por el esférico en centros laterales o saques de esquina. Siempre se le ha dicho de manera irónica que algún día se le caería la portería encima. El juego con los pies puede ser su mejor baza, de hecho ha hecho recortes de infarto frente al delantero en más de una ocasión. Con los guantes ha cumplido puntualmente, pero es cierto que muchos de los goles que ha terminado por encajar, daban la sensación de ser “parables”. De que podía hacer más.
Álvaro Ratón y un adiós anunciado
Tras más de 5.517 minutos defendiendo la blanquilla, se espera que este verano se confirme su salida. No tendría que haber problemas viendo su profesionalidad y el respeto que ha mostrado siempre al club y a la afición.
El arquero ya estuvo a punto de salir en la primera ventana de fichajes de Torrecilla. Allá por enero de 2021. Por entonces, se esperaba una llegada por línea a las filas del Real Zaragoza. En la portería, el encargado de suplirle sería René Román.
El movimiento parecía ya hecho, pero sin embargo, su negativa a última hora de salir al Nástic de Tarragona propició que el gallego continuase al menos una temporada más en la Romareda. Anecdótico fue también que René no pasara el reconocimiento médico del club por problemas en la rodilla.
Con la llegada de Raúl Sanllehi y el cambio de propiedad, el anuncio de la rescisión del contrato de Álvaro Ratón parece próximo. Su salida serviría para liberar masa salarial (unos 200 mil euros anuales según BeSoccer) y, sobre todo, para encontrar a un suplente de garantías capaz de hacer competencia a Cristian, que no renuncia a ascender con el Real Zaragoza y seguirá una temporada más.
La despedida es lo mejor para todos.