Un mes sin llevar un dorsal en la espalda. Es el tiempo que han estado Jorge Arcas y Jaime Castrillo sin competir. Su últimos servicios al azul de Movistar fueron en la carrera de casa, la reciente Vuelta Aragón. Desde entonces la monotonía de entrenar y más entrenar. También algo de descanso, activo por supuesto. Y entrenar más, incluso una Quebrantahuesos mano a mano. También ha tocado rodar por los vecinos puertos franceses de Saint Lary. Y todo para volver a la competición muy cerca de ahí. En la Route d’Occitanie.
Lo harán arropando al campeón del mundo. Alejandro Valverde retoma la competición tras un parón debido a un edema óseo que le impidió ser de la partida en el pasado Giro d’Italia. El bravo ciclista murciano ya se encuentra recuperado y buscará encontrar las buenas sensaciones que esperemos le acompañen en la segunda mitad de temporada. Para su regreso en Francia ha juntado a un grupo de fieles gregarios entre los que se encuentran los dos aragoneses. Jorge, con abuelos en Saint Lary, correrá como en casa. Jaime por su parte, ha estado recientemente junto al de Sabiñánigo reconociendo la zona.
Route d’Occitanie
Serán cuatro etapas, desde este jueves hasta el domingo. Cerca de nuestro Pirineo más oriental. En los valles de Saint Lary y Luchon, de rápido acceso por Bielsa. Dos de ellas a priori sencillas. Las otras dos de montaña, especialmente dura la de la jornada del sábado. Está llamada a ser la jornada que decida la general. Un día con Lançon, Horquette d’Ancizan, Capvern les Bains, Bales y Hospice de France. Ahí es nada. Veremos cual es el plan del equipo telefónico. Veremos como responde Valverde. Si no estará Prades en la recámara. O incluso Pedrero que viene de hacer un gran Giro. Y porque no esperar un día de gracia de uno de los nuestros. Van mereciendo tener algo de libertad.