La actual racha negativa de 7 encuentros sin conocer la victoria es la quinta peor de toda la trayectoria azulgrana en Segunda y la más deficiente desde el último ascenso.
Mucho ha llovido desde aquel 11 de febrero en el que el Huesca cosechó la última victoria de esta temporada, contra la Cultural Leonesa en El Alcoraz. Desde entonces no conoce la victoria y solo ha podido paladear 3 puntos que han dejado un sabor de boca muy agrio, ya que el empate contra el Almería llegó a última hora, el de Reus escaseó de fútbol y el de Cádiz, aun mostrando la reciente mejor versión, careció de lo más importante: el triunfo.
Este periodo de 7 encuentros sin ganar, donde los de Rubi han firmado un pobre bagaje de 3 puntos de 21 posibles tras 3 tablas y 4 caídas, se convierte en el quinto peor de la SD Huesca en Segunda División, y el más adverso tras su regreso a la categoría de plata del fútbol español, hace ya 3 temporadas.
En la 2008/09, cuando el conjunto oscense debutaba en Segunda, los de por aquel entonces Antonio Calderón enlazaron hasta 10 partidos sin ganar, con 4 empates y 6 derrotas, para cerrar la temporada. El hecho de que el Huesca estuviera salvado y de que la posibilidad de ascenso resultara imposible -solo subían los 3 primeros- hizo que los azulgranas se relajaran y acabaran el curso con sensaciones agridulces.
La temporada siguiente, la SD Huesca llegó a acumular 9 jornadas sin ganar, con 5 empates y 4 derrotas, mismo balance que el que tuvo en la 2012/13. Además, en la 2011/12 también estuvo otras 9 semanas sin sumar 3 puntos, aunque en aquella ocasión solo sumó 4 empates, cayendo en 5 partidos, tratándose de la peor trayectoria en cuanto a puntos cosechados consecutivamente.
El cuadro de Rubi deberá ganar a Albacete y/o Barcelona ‘B’ en los próximos días para no pasar a los libros de historia negativos de los azulgranas en Segunda División.