El Levitec Peñas ya está en marcha sobre la pista. Los jugadores han tenido hoy su primera doble sesión de entreno. Por la mañana, tocó correr por el Cerro de San Jorge; por la tarde, ejercicios ya con la bola sobre el parquet del Peñas Center durante un par de horas.
La 2017/18 se abre como una temporada apasionante. Sobre todo, porque la cincha de ascensos y descenso se ha roto. Y eso siempre es un motivo de competitividad. Es algo muy bueno para los jugadores, para los equipos y para los patrocinadores que empiezan a acercarse a los clubes y estos a armar plantillas con más poderío. Es la visualización en el horizonte de la ACB. Porque aquí nadie piensa en lo que ocurre al sur de la tabla. Peñas llega a la línea de salida con la misma ilusión de siempre en los despachos y con más cuajo sobre la pista porque ha podido contar a más jugadores de la pasada campaña y ha incorporado a dos como son Kevin Van Wij y Carles Marzo, que ya han estado a las órdenes del técnico Guillermo Arenas. Todo eso ayuda a que el cuerpo técnico tenga algo del camino desbrozado.
El capitán del Peñas, Jorge Lafuente, mantiene aún clavada la espina de la pasada campaña. No lo puede evitar. “Tengo muchas ganas de resarcirme de la temporada pasada”, dice minutos después de abrochar el entrenamiento vespertino. Ni el largo verano, aunque él siguió un mes más que sus compañeros, le ha hecho olvidarse de una campaña a la que se llegó con el cartel de haber aspirado a la ACB y terminó por pelear por la permanencia. E insiste en que tiene “muy grabado” lo que ocurrió para lo que tiene una explicación y la consiguiente derivada con la finalidad de que no se vuelva a ocurrir. “No se supo renunciar a lo individual para que lo colectivo fuera mejor. Si lo hubiéramos hecho, los resultados hubieran sido otros”, mantiene.
Ahora ha tocado mudar de piel. Comenzar de cero desde ese concepto de que el equipo lo es todo. Y avisa ya de una temporada que se avecina dura y trepidante. “Hay más patrocinadores y más competitividad. Castellón, Palma, Melilla, Manresa, Coruña… tienen plantillas muy buenas”, dice en un entrecomillado en el que deja claro que esta LEB Oro ha subido en calidad producto de que la puerta de los ascensos y descensos de la categoría son una realidad a diferencia de campañas anteriores.