Hay ocasiones en el que el resultado de un partido trasciende del juego visto sobre la pista. El Bada Huesca acaba de derrumbar la mala imagen que ofreció ante Cuenca en el Palacio de los Deportes –más que arreglada ya ante Benidorm- y sobrepasa en la Asobal a un equipo bien cuajado como es Valladolid. Y es que los castellanos han cosido un siete donde juventud y veteranía se dan la mano para correr y levantar un muro defensivo delante de todo un veterano como es Javi Díaz. Las victorias hay que enmarcarlas no solo por la envergadura de quien propone un juego distinto, también cuenta lo que uno presenta para jugar. Y si bien Valladolid compareció con la baja de Rubén Río, Bada lo hizo sin Camas, Mikel Mugerza y Bonanno. Cuando el rival tiene fondo de armario amplio, contar de saque con tres jugadores menos todo se hace más difícil. || FOTOS DEL PARTIDO.
El partido del Bada fue coral. El triunfo se sustento en la brega de todos y cada uno de los que saltaron al 40×20. Pero también tuvo nombres propios. Jorge suplió a los 11 minutos a Dani Arguillas, quizá aturullado con tres siete metros en los 8 primeros minutos. Y Jorge volvió a ser don Jorge. Se puso a parar bolas difíciles que sirvieron para dar aire a sus compañeros y empezar a creerse una victoria de puro tesón.
El partido pudo tomar un cariz distinto en gol de Oier –otra vez pugnando hasta con su sombra- que puso el 4-5 en el electrónico. Teixeira se quedó en el suelo y se fue al banco con molestias en la rodilla izquierda. Bada mantiene una ‘teixedependencia’ pero hubo mano de santo y pronto regresó a la pista. Nombres propios para añadir el de Álex Marcelo. Volvió a demostrar el poderío de su lanzamiento con goles de bellísima factura y se fajó en el ataque contra tipos que le superan por muchos kilos. También Carmona tuvo una noche dulce y lo celebró con sus incondicionales en cada gol y tras el último bocinazo.
La pelea de Carró y Val con el centro de la defensa de Valladolid fue de las que le gustan al zaragozano. De esas donde hay que dar, recibir, callar, buscar los huecos y pillar las bolas como se pueda. Es cierto que Val pecó de mala fortuna, pero bregó y mucho en la línea continua. Una empresa nada fácil con el pequeño de los Dujshebaev, Serdio y Turrado por allí.
Bada siempre llevó el dominio en el marcador, pero sin que su diferencia pasara de los dos tantos de forma clara para romper el encuentro. Valladolid llegó a tener bola para empatar el partido, pero finalmente los dos puntos se quedaron en casa y el siete de Nolasco duerme en la séptima posición de la Asobal.
LA FICHA
Bada Huesca: Arguillas (p), Teixeira (7), Carmona (4), Carró (2), Eloy Félez (1), Oier (2) y Marcelo (4). Siete inicial. Jorge Gómez (ps), Val (1), Todorovic (2), Ariño (1) y Mira (1).
Valladolid: Javi Díaz (p), Diego Camino (1), Fernando Hernández (4), Abel Serdio (3), Jorge Serrano (3), Miguel Camino (1) y Víctor Rodríguez 2). Siete inicial. César Pérez (ps), López (1), Turrado, De la Rubia (1), Roberto Pérez (2), Matías (1), Daniel Dujshebaev (5) y Grossi.
Parciales cada cinco minutos: 2-1, 2-3, 5-5, 7-7, 11-9, 13-12 (descanso) 16-14, 17-15, 20-18, 22-21, 23-22 y 25-24.
Árbitros: Iniesta y Soria. Excluidos Carmona y Ariño por el Bada Huesca; Matías y Dujshebaev por Valladolid.