El Palacio de los Deportes de Huesca se prepara para la posibilidad de que los aficionados puedan presenciar los partidos del Bada Huesca y Levitec Huesca. Los dos clubes siguen a la espera de lo que determine el Gobierno de Aragón. Confían en ello con la mejora de datos de la Covid-19. Y mientras se decide o no, en el graderío, cintas para separar espacios. Sobre el parqué, los entrenamientos siguen. Esta mañana, el Bada Huesca ha relevado al Levitec.
El siete altoaragonés sigue activándose de cara al inicio de la Asobal 2020/21. El 9 de septiembre es la fecha elegida. Se aplazó el inicio y, de momento, esa es la fecha. El grupo sumará, así, una semana más de entreno. Y no una cualquiera. La sexta. La que completa la pretemporada. Seis semanas para cohesionar un equipo que deja muy buenas sensaciones tras los amistosos disputados. Lo visto contra Anaitasuna, Granollers y Bidasoa, en dos ocasiones, es esperanzador.
Alex Marcelo, ocho temporadas ya defendiendo el escudo del Bada, no esconde que el equipo tiene muy buena pinta. “Estamos con muchas ganas. Haber tenido una semana más sirve para perfeccionar la defensa, el ataque, esas cosas que siempre quedan por pulir. La verdad es que nunca viene mal una semana así”, señala. El zurdo subraya que “esta es una de las mejores pretemporadas que hemos tenido desde que yo estoy aquí. La verdad es que después de cinco meses parados teníamos muchas ganas de empezar y eso se ha visto en los amistosos. Más allá del resultado, las sensaciones de juego, tanto en defensa como en ataque, es para estar contentos”, indica el capitán.
Uno de los puntos fuertes de los que siempre ha hecho gala el Bada Huesca ha sido su defensa. Y la próxima temporada no será una excepción. Se perdió a Marco Mira -todo un referente- y se ha fichado a gente con kilos y centímetros para armar un buen muro por delante de la portería. “Tenemos más variedad ahora”, dice Marcelo. Asier ha subido un punto en su intensidad, tanto en el centro de la defensa como en el dos y se desliza como el jefe del muro.
La velocidad de su brazo y la calidad que atesora son determinantes para Marcelo. Es un arma de ataque más que de defensa, cuando no puede hacer el cambio, se sitúa en el extremo. No esconde que alguna vez le gustaría emplearse atrás para equilibrar, al menos en parte, lo que tiene que soportar cuando debe enviar la redonda a la portería. “Sí, alguna vez -desliza entre risas- me gustaría defender alguna y devolverla. Llevo muchos años ‘recibiendo’ y es lo que toca. Te sientas, enfrías la mente y ya está”.
El capitán no hace una traslación a lo que puede hacer el Bada en la temporada. Lo que tiene claro es que hay mucha igualdad entre los equipos y esta Asobal, con dos equipos más todo será más difícil. Y el último factor será en fusión de si hay o no público en la grada. Está claro que no se juega igual. La sensación es que se parecerá más a un entrenamiento que a un partido con puntos en juego.