Cansados. José Francisco Nolasco reconoce de forma abierta cómo se encuentra el equipo cuando la semana termina este domingo contra el Valladolid en el Palacio de los Deportes. Será el broche a siete días con tres partidos, dos de ellos fuera de casa y sus respectivos viajes. Cangas no está precisamente cerca e Irún supuso otro trayecto. Por si fuera poco, los dos rivales eran de campanillas. Valladolid tampoco es un siete sencillo. Esta Asobal no permite relajación alguna. Además, ya ganó en el encuentro de la primera vuelta con Lamariano de estrella invitada.
Los castellanos ocupan actualmente la penúltima plaza de la Asobal. Los altoaragoneses son decimo segundos con un punto de diferencia entre ambos. Un dato revelador de lo importante que es el encuentro para ambos equipos. Es cierto que el Bada tiene un partido menos, pero da igual. El Bada Huesca llega con Alex Marcelo que va evolucionando y la duda del concurso de Montoya y Joao Pinto que no pudieron estar contra Bidasoa. “No estamos con las mejores fuerzas posibles”, señala Nolasco. El técnico espera recuperar al central Sergio Pérez, con molestias en el pubis, aunque no estará al cien por cien de su capacidad. Eso sí, su calidad es indudable y por poco que pueda aportar, siempre será bienvenida.
Valladolid llega con el refuerzo del brasileño Tarsicio Freitas, un joven central -22 años- que puede jugar en otras posiciones, con buen lanzamiento y que también se emplea en defensa. El técnico recuerda que en el partido de la primera vuelta, el siete altoaragonés dominó durante muchos minutos, pero se descalabró en el último tramo. “Esto es lo que tenemos que evitar. En esta segunda vuelta tenemos la experiencia de la primera”, señala Nolasco.
El siete castellano, con Miguel Martínez y Patrianova, además de Serrano en el extremo derecho y el propio Tarsicio conforman un buen equipo que sorprende que estén al sur de la clasificación. Con un juego donde influye mucho el pase pivote y a la carrera; en defensa varían su defensa desde el 6:0 al 5:1 o al 3:2:1.