Real Zaragoza y Celta son dos equipos que han venido desplegando diversas negociaciones en los últimos mercados de invierno. Hace 4 temporadas fue Borja Iglesias quien llegó cedido a la capital aragonesa. Por entonces era aún un joven prometedor formado en el filial del Celta y sin hueco en el primer equipo. El Zaragoza le catapultó al más alto nivel del fútbol profesionales y desde entonces la vinculación, con especial cariños, entre el jugador, el club blanquillo y su afición siempre ha estado ahí.
Peor suerte ha corrido el último jugador en llegar cedido desde el Celta al Real Zaragoza. El “Toro” Fernández recalaba en el club aragonés en el verano de 2020 y a pesar de haber dispuesto de numerosas ocasiones con los tres entrenadores que ha tenido el Zaragoza en esta última temporada, el atacante se ha marchado sin haber marcado ni un solo gol en Liga. El Celta quería que ganase experiencia y goles para revalorizarlo, pero la operación ha sido infructuosa para todas las partes.
Baeza, la negociación más inmediata del Real Zaragoza
Ahora, Zaragoza y Celta vuelven a cruzar sus caminos en este mercado de fichajes. Lo hacen en esta ocasión para negociar por el centrocampista Baeza que, según han adelantado diversos medios gallegos como La Voz de Galicia, no tiene sitio en el club vigués para la próxima temporada. Con Baeza se da la circunstancia de que el Celta realizó un gran desembolso para hacerse con la mitad de sus derechos. El jugador pertenecía al Real Madrid y el Celta pagó por el 50% de sus derechos la cuantía de dos millones y medio. Tiene contrato con el club gallego hasta 2025.
Baeza era una apuesta de futuro para el Celta y puede seguir siéndolo, pero no se contempla su participación en el equipo a corto plazo. Esta temporada apenas ha jugado 500 minutos, casi la mitad de ellos a comienzos del curso por lo que su participación ha ido perdiendo enteros con el paso de las jornadas.
El jugador se desenvuelve en el centro del campo, es zurdo e internacional sub19. Llegaría a Zaragoza cedido por al menos, una temporada. El futbolista gusta a JIM y Torrecilla, pero la operación no se cerrará hasta que primero se produzcan los inminentes movimientos en el accionariado del club. Los cambios en la propiedad pueden suponer cambios en la parcela deportiva, aunque no se descarta la continuidad de Torrecilla ni de JIM. Todo ello son flecos por cerrar y hasta entonces los fichajes, con Baeza en el horizonte, deberán esperar.