El Balonmano Dominicos Zaragoza ha vuelto a hacer historia al proclamarse campeón de Aragón de Segunda Nacional tras una década de espera. Lo ha logrado con una actuación impecable en el sector autonómico disputado en Huesca y Almudévar, en el que se midieron los cuatro mejores equipos de la temporada: Oscatech Huesca, Balonmano Almogávar, Balonmano Casetas y el propio Dominicos.
Con una plantilla formada íntegramente por jugadores salidos de su cantera, el club colegial ha firmado un torneo perfecto, imponiéndose en sus tres encuentros y venciendo en la gran final al gran favorito y anfitrión, Oscatech Huesca, por un ajustado 24-25.
Un inicio solvente y un sábado brillante
El camino al título comenzó el viernes con una victoria frente a BM Casetas (25-20), en un partido áspero pero efectivo para romper el hielo del torneo. Ya el sábado, el equipo dirigido por el cuerpo técnico colegial firmó un partido redondo ante Balonmano Almogávar, al que venció por un claro 26-18. La figura del encuentro fue el guardameta Mario Flores, que cerró su portería con un 60% de acierto, convirtiéndose en un auténtico muro para el ataque rival.
Final dramática y épica victoria
Todo quedaba para el domingo. Un auténtico duelo de titanes entre Oscatech Huesca, dominador de la liga regular, y Dominicos, que llegaba en su mejor momento. A los locales les valía el empate, pero el equipo zaragozano salió a ganar. El partido fue un toma y daca constante, con alternativas para ambos y máxima tensión hasta el final.
Tras un primer tiempo igualado (12-13), Huesca tomó la iniciativa en la segunda mitad, pero Dominicos supo reaccionar. En los últimos minutos, el marcador se movía gol a gol. Finalmente, un tanto decisivo dio la victoria a los blanquinegros por la mínima: 24-25.
Premio al trabajo de cantera
Este título supone mucho más que un trofeo para el club zaragozano. Representa el éxito de un modelo basado en la formación de jugadores propios, sin fichajes externos, y con una identidad muy clara. Ahora, Balonmano Dominicos se prepara para afrontar la fase de ascenso a Primera Nacional, donde buscará unirse a clubes aragoneses como Contazara Zaragoza o Balonmano Tarazona.
El ascenso no será sencillo, pero el equipo ha demostrado que tiene las armas necesarias para luchar de tú a tú con cualquiera.