Un paso delante de los nobles y con la guardia protegiendo sus espaldas. Hierático. El obispo de Montearagón no movía músculo alguno. Tras la meta del II Podoactiva Medieval Trail de Quicena allí estuvo. Impertérrito. Menos mal que el tiempo y la historia evolucionan. Pero sin duda, en el denso calendario de carreras por montaña, el trail de Quicena destaca. Una tarde festiva que coronó a Lorenzo Buil y Silvia Ferrer. Ambos de Huesca. Y ambos victoriosos de un trail que pivota sobre el castillo de Montearagón, otrora poderosa, hoy necesitado de cariño en forma de euros para recordar la historia viva de un territorio que fue Reino y Corona.
Lorenzo Buil estaba feliz en meta. Fue el primero en completar los 17 kilómetros y 600 metros de desnivel positivo en un tiempo de 1h25m18s. El año pasado fue tercero en este trail y el primer puesto le supo a gloria. Además, con dedicatoria. Hace poco ha sido padre, por lo que este profesor de francés en el colegio Pirineo-Pyrinées de Huesca tuvo claro que la victoria iba para el pequeño Luca y para su chica, Sophie. “La temporada la he comenzado aquí”, dijo exultante. Sus próximas citas las medias maratones de Barbastro –campeonato de Aragón- y la de Huesca. “El recorrido me ha parecido muy bonito y muy bien señalizado y eso siempre ayuda”, dijo.
Partió en el grupo de cabeza y también fue el más rápido en el Memorial Raúl Lansac al que la organización le rindió un homenaje (los padres de Raúl hicieron la andada y su entrada en meta fue uno de los momentos más emotivos de la tarde) dando su nombre a la durísima subida al castillo de Montearagón. La hizo en casi 9 minutos (8.57). “La he hecho toda corriendo”, dijo. Y fue en su base donde se decidió la carrera. Hasta allí compartió cabeza con quien a la postre fue segundo, Alex Arpal.
El ganador de la segunda edición procede del ciclismo y desde hace año y medio estuvo volcado en el triatlón. El paso a las carreras por montaña no lo ve claro ya que no se ajustan a sus características.
La ganadora de la prueba, Silvia Ferrer, -también fue la primera en la subida Memorial Raúl Lansac- estaba contenta tras cruzar la meta y repetir triunfo ya que ganó en la primera edición. “Han sido más kilómetros que el año pasado, parece que por aquí el terreno no es tan duro, pero se trata de una prueba difícil y en los dos últimos kilómetros he ido muy justita de fuerzas”.
Ferrer ha hecho un entreno de calidad de cara al próximo reto que tiene: el ultra trail Guara Somontano que se celebra en el primer fin de semana de octubre. Su objetivo es ser ‘finisher’ como fue el año pasado en una edición donde acabó segunda de veteranas y quinta de la general.
Mientras los corredores de la trail entraban en meta fue un continuo pasar de los participantes en la andada de 6 kilómetros de una prueba que también tuvo un entrañable recuerdo para Antonio Gutiérrez, presidente del Club Atletismo Huesca que, entre otras muchas actividades, fue uno de las personas fundamentales en sacar adelante esta Podoactiva Medieval Trail. Conforme cayó la noche, las paredes del castillo, símbolo de un territorio, se iluminaron con los colores de la bandera de Aragón y terminar la fiesta con una cena popular.
