Gracias al empate frente al Bilbao Athletic (0-0), el Huesca finalizó la primera vuelta de la temporada 2014-2015 en la primera plaza del Grupo II por primera vez en su historia.
Pocas veces un punto sabe tan bien. Sumar fuera de casa siempre dicen que es importante y el pasado domingo el Huesca no sólo sumó un punto a domicilio frente a uno de los rivales más fuertes de la categoría, sino que además ese punto le supuso terminar la primera vuelta de la temporada como primero de grupo de Segunda B por primera vez en su historia. Con 35 puntos, el equipo oscense es líder en solitario del Grupo II, seguido por el Real Unión, con 34 puntos; el Real Madrid Castilla, con 31; y el Bilbao Athletic con 30.
El año pasado, al acabar la primera vuelta de campeonato, el Huesca ocupaba la sexta posición en la clasificación del Grupo II. Entonces, la primera ronda terminó el 22 de diciembre en Tudela, frente al Tudelano, y el conjunto oscense se impuso por la mínima (0-1) gracias a un gol de Marcos Mauro. Con 33 puntos en su casillero, el Huesca estaba entonces empatado a puntos con el Fuenlabrada (5º), el Bilbao Athletic (4º), el Barakaldo (3º) y el Toledo (2º), afrontando el inicio de la segunda vuelta con la ilusión de entrar por primera vez después del descenso en la zona de ‘playoff’, que finalmente no conseguiría en toda la temporada. Anecdóticamente, el Leganés, que acabó la primera vuelta con 32 puntos en el séptimo puesto de la clasificación, justo detrás del Huesca, acabaría ascendiendo a Segunda División a final de temporada.
Es importante, esperanzador y halagüeño acabar la primera vuelta en el primer puesto liguero, además mereciéndolo, pero en enero no se acaba la temporada y se avecinan 19 batallas más en las que habrá que seguir luchando por el objetivo y el sueño final del ascenso.