ZARAGOZA | Esto no para. Tras caer en la pasada jornada liguera ante el Tenerife, los de Fisac ya ponen el foco en su próximo duelo ante Baxi Manresa a domicilio, en un duelo que históricamente siempre ha estado realmente igualado y en el que los detalles han decidido el vencedor por la mínima. De hecho, en las últimas 4 temporadas, el equilibrio ha sido la tónica dominante, ganando cada equipo 4 partidos al otro —contando un amistoso en septiembre previo al inicio del curso 2023/24 que se llevó el cuadro catalán—, con la intensidad y un gran caudal de puntos como eje común. En el Nou Congost, pabellón del Manresa, los maños solamente han ganado una vez en los tres duelos a domicilio jugados en estos últimos cuatro años, cuando vencieron en enero de 2023 por 65-72
De hecho, si viajamos tres meses en el tiempo, muchos recordarán la cruel derrota en la ida de este curso 2024/25, en la que los de Fisac cayeron por la mínima 92-93, en un encuentro que acabó marcando un antes y un después para los rojillos, que decían adiós a la Copa del Rey con un sabor amargo en la boca. En aquel partido, el ala-pívot estadounidense Alston Jr. (22 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias para 26 créditos y el MVP) y el escolta también americano Cameron Hunt (22 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias para 24 unidades) fueron un auténtico dolor de muelas, monopolizando el ataque visitante y obligando a los rojillos a ofrecer su mejor versión.
Ahora, Baxi Manresa vuelve a estar en el medio del meollo de nuevo. En la ida, los de Diego Ocampo impidieron con su triunfo que los rojillos accedieran a la Copa del Rey (iban séptimos y Casademont octavo a falta de dos jornadas para cerrar la primera vuelta), y en la vuelta vuelven a ser el principal escollo para el cuadro aragonés -en décimo lugar- en la pugna por los playoffs por el título, pues actualmente son octavos, con 13 victorias respecto a las 11 rojillas, y marcan el corte de acceso a las eliminatorias por la Liga. Por todo ello y por recuperar el basketaverage de cara al futuro (solamente es un punto al ser 92-93), la victoria sería un soplo de aire fresco para los de Fisac.
En cambio, una derrota rojilla ante el Manresa, unida a un triunfo de Río Breogán y otro de UCAM Murcia (11º y 12º), podría dictar sentencia para el Casademont Zaragoza, que bajaría un par de escalones en la clasificación, concretamente hasta el duodécimo puesto. A pesar de que el Baxi Manresa aterriza tras tres derrotas consecutivas en ACB (Lleida, Baskonia y Gran Canaria), no será un hueso sencillo de roer para el Casademont. Y más porque los de Fisac tampoco llevan mucho mejor transcurso, con un triunfo (ante Unicaja) en sus últimos 5 partidos ligueros. No obstante, la realidad es que están mostrando mejores sensaciones que los catalanes, pues cayeron en sus dos últimos encuentros ante Tenerife y Barça, pero únicamente por 4 y 2 puntos, respectivamente, estando realmente cerca de hacerse con el triunfo, tanto a nivel de juego como estadístico.
Así, con todo ello, los rojillos intentarán dar un golpe sobre la mesa para encarar la recta final del curso con opciones de meterse de lleno en playoff. Para los intereses del Casademont, ganar a Manresa es innegociable.