Estaba claro que en caso de vencer al Cádiz, el Huesca se iba a llevar 3 puntos no del todo merecidos. Pero cuando no haces ni méritos para ganar ni sabes agradecer el regalo que te ha caído del cielo, pasan cosas como la acontecida en El Alcoraz.
Los 90′ vistos hoy (ver crónica) resumen bastante bien la segunda vuelta oscense: un estilo de juego lento, previsible y tedioso, una incapacidad total para sacar el balón jugado y una nula mentalidad para cerrar los partidos. A día de hoy, se cuentan a pares los partidos en los que los fallos individuales de jugadores han costado puntos a los de Míchel.
Míchel (4) Desesperante: Una vez más, el míster oscense decidió no hacer ningún cambio en su planteamiento del choque. Con un 11 más vistoso que otros días, decidió no asumir prácticamente ningún riesgo. Sí que es cierto que el equipo pareció mejorar algo en la recta final, tras encontrarse con el gol. Pero nada más lejos de la realidad en la que los nervios costaron al Huesca dos puntos, el golaveraje ante el Cádiz y quizá algo más en el futuro.
Álvaro (5) Positivo: Pese a su suplencia a la vuelta del parón, el meta riojano está a buen nivel. Ha parado las pocas en las que ha tenido que intervenir y no pudo hacer nada en la pena máxima: pese a intuirla, el disparo iba demasiado potente.
Luisinho (3) Borrón: El luso estaba cuajando un partido bastante decente dentro de la mediocridad azulgrana. Pero su penalti, infantil y provocado por una mala colocación, costó demasiado al equipo y al ánimo de la afición.
Pulido (6) Decente: Sin estar ni de cerca a su mejor nivel físico, el zaguero lució dotes para aportar tanto atrás como en zona ofensiva a balón parado. Pese a ello, es de vital importancia que recupere su forma física, puesto que lo que aporta al equipo a nivel de integridad, salida de balón y coraje no se lo aporta ningún otro jugador.
Insua (5) Intrascendente: Tuvo poca incidencia en el juego. Casi regaló otro gol dejándola pasar, pero no tuvo tan mala fortuna como hace dos jornadas. En lo demás, mejorando en defensa pero lejos aún del que se vio la temporada pasada.
Pedro López (4) Mejorable: Ni apoyó bien al equipo en labores ofensivas ni fue un cerrojo en las defensivas. Cometió una falta que se fue al larguero en una contra muy mal replegada por toda la defensa oscense.
Mosquera (5) Solo: Sus compañeros de centro del campo vivieron todo el partido el línea de tres cuartos, provocando que el gallego estuviese solo ante el peligro. Los pases a él fueron equilibrismos de los que en varias veces el equipo cayó. Ha sido, en líneas generales, su mejor partido desde la vuelta a los terrenos de juego. Asistió en una jugada muy similar a la del gol de la victoria en el derbi aragonés de la primera vuelta.
Mikel Rico (4) Asfixiado: El ritmo de competición y las exigencias del míster de presión en campo rival están dejando al vasco muy gris en las pasadas jornadas. Tuvo uno de los pocos tiros claros de los que gozaron los azulgranas, pero no logró anotar con un disparo que requería más potencia de la que imprimió.
Juan Carlos (4) Intento: Se le dio una nueva oportunidad y lo intentó con esmero, pero no logró ser trascendente. Muy caído a banda, con demasiada distancia al balón cuando iba arriba y a la parcela ofensiva cuando bajaba tímidamente a recibir. No tuvo su día pero sí lo intentó.
Mboula (4) Descaro: Es uno de los pocos que busca el 1 contra 1 casi siempre que puede. Tuvo alguna acción aislada buena, pero ninguna sirvió para nada.
MVP | Ferreiro (7) Único: A día de hoy, junto a los delanteros y Pulido, es el que le imprime algo de carácter al equipo. Además buscó con insistencia por ambas bandas, con centros y tiros que no llegaron a ningún sitio. Botó una buena falta que acabó en gol tras un desajuste defensivo gaditano.
Mir (6) Autosuficiente: Va a otro ritmo. Pese a no haber anotado hoy, corre cada balón como un perro de presa. Su capacidad de remate es explotada por Míchel a sabiendas de que para centrar no hace falta generar muchos espacios y el murciano trataría de rematar hasta un piano de cola si hiciera falta.
Los cambios
Okazaki (6’5) Olfato: Igual que la pasada jornada, la sabiduría de la que goza el nipón fue determinante. Anotó su noveno gol como jugador de la SD Huesca en una jugada aislada que defendió mal el Cádiz, en uno de los pocos fallos que tuvieron los andaluces.
Galán (6) Doble: Entró como extremo izquierdo para ayudar a Luisinho en los últimos minutos, a sabiendas de que el lateral tenía tarjeta y el Cádiz apretaba. No lo hizo mal pero no logró solventar la carencia defensiva que Míchel detectó e intentó paliar.
Doukouré (5) Despeje: Entró para formar un trivote en el centro del campo cuando el Cádiz introdujo artillería en el campo y se dedicó a bombear balones lejos del área del Huesca conforme estos le pasaban cerca.