El Lobe Huesca firmó su mejor partido de la temporada y pasó por encima del Ciudad de Huelva, al que no dio ninguna opción y le infligió una severa derrota. Los oscenses mostraron una actuación coral con seis jugadores superando la decena de puntos, un dominio aplastante en el rebote (48-27) y una gran seguridad en el manejo del balón, perdiendo solo cuatro balones en todo el encuentro.
Antes del partido, el club rindió homenaje al speaker Jesús Pena, en reconocimiento a su incansable labor de animación durante los últimos diez años.
Un inicio arrollador y sin respuesta del rival
Con Nacho Biota al mando desde el banquillo, el Lobe Huesca arrancó con Abdulsalam, Shelist, Breacey, Vázquez y Rubín de Celis en el quinteto inicial. Desde el primer momento, los peñistas impusieron un ritmo frenético, con una gran intensidad defensiva y rápidas transiciones ofensivas culminadas por los triples de Breacey y Shelist. Mientras tanto, los onubenses, desacertados en el tiro, encontraban su única referencia ofensiva en el pívot Chabi Yo.
Una canasta de Vázquez obligó al primer tiempo muerto visitante (14-6). La dupla Abdulsalam-Shelist se mostró imparable: el nigeriano dominaba en la pintura, mientras que el ucraniano castigaba desde el exterior. Biota mantuvo muchos minutos a su quinteto inicial, aunque la segunda unidad, con Marín, Knowles e Iglesias, mantuvo la intensidad defensiva pese a que los puntos llegaban con menos fluidez. Un triple de Knowles cerró el primer cuarto con un claro 24-10.
Sentencia al descanso con una avalancha de juego
El segundo cuarto siguió con un Peñas arrollador, con canastas de Figueroa y un 2+1 de Breacey. Los visitantes naufragaban ante el vendaval verdiblanco. Los interiores oscenses dominaban cerca del aro y Shelist (13 puntos) y Abdulsalam (11) se imponían con autoridad. El equipo recuperaba balones y corría sin descanso, ampliando la brecha hasta un 45-18. Con todos los jugadores aportando puntos y un gran acierto desde el perímetro, el partido quedó sentenciado antes del descanso (53-21).
Sin concesiones hasta el final
Tras la reanudación, el Ciudad de Huelva salió con otra actitud, intentando maquillar el resultado. Gonzalo Fernández, con un triple, inauguró la segunda mitad. Fernández y Mays lideraron un pequeño intento de reacción que redujo la diferencia hasta el 56-28. Sin embargo, los oscenses no levantaron el pie del acelerador y siguieron dominando en el rebote, logrando numerosas segundas oportunidades.
A diferencia de los andaluces, que jugaban de manera individual, el Lobe Huesca siguió funcionando como un equipo coral. Un triple de Rubín de Celis dejó el marcador en un contundente 74-38, dejando todo visto para sentencia.
El último cuarto fue un calco de los anteriores: un Peñas dominante, que corría y disfrutaba ante su afición. Las rentas superaron los 40 puntos (85-45), pero el equipo mantuvo su intensidad hasta el final, luchando cada balón como si fuera el último. El canterano Iker Terreros tuvo sus minutos y cerró el partido con una canasta sobre la bocina. Un broche perfecto para un partido inolvidable: 99-60.