A un delantero siempre se le pregunta en pretemporada por el objetivo que se marca, por los tantos que se va a llevar a la caseta cuando la liga termine. Y el colombiano ‘Cucho’ Hernández no rehuyó la pregunta al término del entrenamiento. Lo fija en un mínimo de 10 tantos. La pasada temporada puso el techo en 15 y consiguió 16. Sabe que este año será difícil. El Huesca buscará el cuero, pero tocará mucho trabajo para dominarlo. Le va a tocar más tiempo corriendo detrás de la pelota, que sobandola. Al menos sobre el papel.
Eso sí, la carga física de la pretemporada ya está almacenada. Contra el Eibar se vio a un Huesca distinto al del fútbol que desplegó contra el Osasuna y el Numancia. Nuevos jugadores y nuevo cuerpo técnico obligaron a tomar las medidas del traje con más paciencia. Lo importante, deslizó ‘Cucho’, es que “estamos demostrando que todos estamos comprometidos”. Las victorias añaden un plus de seguridad al bloque y otro añadido a los delanteros. “Meter goles te da confianza. A mí y a todos. Ahora lo que toca hacerlo es en la Liga”, añadió. El delantero significó en que ahora están un poquito más tranquilos “y hemos podido relucir más la calidad y demostrar que podemos jugar bien”, matizó.
El delantero no esquivó que hay ganas por empezar a jugar en la que está considerada como la mejor liga del mundo y la de cumplir el sueño de cualquier chaval que a él le va a llegar con 19 años. Tampoco escondió ‘Cucho’ que “sentimos nervios de querer jugar y demostrar al mundo que si subimos fue porque nos lo merecimos”. Eso sí, eso de arrancar la liga con tres partidos fuera de casa no es de su agrado, sobre todo, porque es consciente de que jugar en El Alcoraz “es muy importante para nosotros”. La espera al debut habrá que hacerla de la mejor manera posible.