Flagstaff. Estados Unidos. Esta es la próxima carrera de Dani Osanz. Por delante tendrá tendrá 26 kilómetros con 1.000 metros de desnivel sobre un terreno muy corredero. El jacetano se colgó el pasado fin de semana la plata en la Pikes Peak. Ni que decir tiene que este fin de semana aspira a repetir o mejorar. Llegó a la Pikes Peak con el tiempo justo para pincharse el dorsal en una carrera que asciende a los 4.000 metros. Aprovechó unos días en Moab, en el Cañón del Colorado, para hacer descanso activo y algo de turismo.
Ahora ya se encuentra en Arizona, ultimando su preparación para la carrera de Flagstaff, que se disputa el domingo 25. “En el Gran Cañón estuvimos a 1.500 metros de altitud, ahora ya estamos a 2.500 y se nota el cambio de altitud. Y se nota para todo; para comer, para dormir y para descansar”, señala.
Este jueves tiene previsto ver el recorrido, hacerse a la idea de cómo puede ser la carrera. “La máxima es descansar bien y en pensar en cómo enfocar la carrera”, indica. La plata conseguida en este capítulo de las Golden Series le ha llevado a adquirir cierto protagonismo. Bueno, más protagonismo del que ya tiene de por sí. Muchas entrevistas en inglés -“que nunca había hecho”, señala-, declaraciones a medios, aunque “nada de esto me altera. Soy muy autoexigente, siempre quiero más y el domingo intentaré gestionar la carrera de la mejor forma posible. El objetivo es ser Top-10 e incluso Top-5″, en Flagstaff.
Osanz, décimo en la general
La plata del pasado fin de semana sumado al octavo puesto en la Sierre-Zinal le dejan en décima posición de las Golden Series con lo que una buena posición en la carrera del domingo le abrirá la puerta a mejorar su posición en la clasificación. Ahora mismo atesora 294 puntos y los tres primeros puestos los ocupan son el italiano David Magnini, el suizo Rémi Bonnet y el marroquí Elhousine Elazzaqui.