En su rueda de prensa de presentación como jugador del Real Zaragoza, Daniel Torres dejó entrever la madurez y la experiencia que puede otorgarle al equipo aragonés.
El mediocentro colombiano de 30 años tuvo sus primeras palabras como jugador blanquillo a pesar de haber debutado ya el pasado domingo en Cádiz. “Trataré de aportar la experiencia que he podido tener estos últimos años y unirme a esa visión clara y única que existe” señaló Torres con una voz grave y profunda que armoniza con su rostro maduro.
La experiencia de Torres, clave
Es lo que buscan de él Lalo y Víctor Fernández: Experiencia. Un perfil de centrocampista veterano apto para leer cualquier partido y ayudar especialmente en aquellos en los que el Real Zaragoza no pueda imponer su sello futbolístico. El tándem Guti-Eguaras está funcionando con soltura. No obstante el equipo necesitaba un sustituto desde el banquillo con otros atributos, más aún con la lesión de Javi Ros.
Daniel Torres va ayudar al Real Zaragoza con sus condiciones a ser un equipo aún más serio y con otros registros. En partidos más exigentes defensivamente, o en los que sea necesario un mayor número de efectivos por dentro el mediocentro cedido por el Alavés va a ayudar. Ya lo hizo en Cádiz, donde sustituyó a Igbekeme y formó doble pivote con Eguaras.
“En Cádiz empecé sintiéndome muy bien ya desde el banquillo. Cuando vi al equipo con ese carácter y esa personalidad como visitante se reforzó mi idea de venir aquí. La ambición y el objetivo de volver a Primera fueron los valores que me hicieron venir aquí” explicó Torres.
La trayectoria del jugador cafetero da para una larga lista. Con una larga carrera en Sudamérica, ganando todos los títulos locales en el Santa Fé colombiano, y teniendo participación regular en la Libertadores, Torres cruzó el charco tras su gran Copa América en 2016. Colombia finalizó tercera del campeonato y fue un fijo en el centro del campo, portando incluso la capitanía.
Su compatibilidad con Eguaras, la única duda
Su paso por el Alavés fue de más a menos, recibiendo por medio una cesión al Albacete la pasada temporada. Sus rituales a la hora de saltar al césped descalzo o sus problemas con el alcohol en los inicios de su carrera son otras de las curiosidades de Daniel Torres.
Queda por ver testar su compatibilidad con Eguaras, con quien a pesar de ser un jugador totalmente antagónico puede pisarse en cuanto a zonas de acción. No obstante su llegada parece un claro acierto del club para reforzar una plantilla débil en cuanto número de jugadores, pero muy fuerte en cuanto a calidad futbolística y emocional.