Borja Lázaro volvió a dejar su sitio a Vinícius Araújo en el último choque liguero y la figura del delantero centro está más en el aire que nunca.
Este Huesca no ofrece dudas. El equipo juega y funciona como nunca pero si hay una posición que siempre se encuentra en el centro de todas las miradas esa es la del delantero centro. En el conjunto azulgrana es Borja Lázaro quien ocupa el puesto del ‘9’ y pese a no rendir por debajo de sus posibilidades y seguir demostrando que es el ariete que necesita un equipo como el Huesca actual, sus últimas sustituciones y el no estar acertado cara a puerta parecen abrir un debate que a día de hoy todavía no existe.
Llegó Vinícius Araújo en el pasado mercado invernal y nada más hacerlo debutó como titular al no estar disponible su compañero Borja. Lo hizo frente al Alcorcón en un encuentro que el Huesca perdió 0-1 y no ha vuelto a partir de inicio. Desde entonces el brasileño solamente se ha quedado sin participar en el del Sevilla Atlético, aunque iba a hacerlo; en los otros 6 ha salido desde el banquillo y hasta 5 comparten la misma peculiaridad: el sustituido ha sido Borja Lázaro. Una curiosidad que no es tanta si nos fijamos en que en estos cinco encuentros el Huesca no ha ido perdiendo, por lo que no existía una gran necesidad por arriesgar.
El ’11’ azulgrana entró por Lázaro en Tarragona (73′), en Córdoba (87′), en Elche (71′), frente al Valladolid (65′) y en Almería (58′), siendo en el Juegos del Mediterráneo cuando más ha jugado partiendo como suplente. En el derbi aragonés Vinícius también participó aunque en aquella ocasión sustituyó a Camacho (64′), siendo la primera y única ocasión hasta la fecha en la que los dos delanteros azulgranas han compartido terreno de juego. Frente al Zaragoza el brasileño originó la jugada del 2-3 pero todavía no ha logrado estrenarse como goleador, mientras Borja ya suma 6 dianas.
Los 194 minutos (poco más de 2 partidos totales) de los que ha gozado el futbolista del Valencia son insuficientes para un jugador llamado a marcar las diferencias en el ataque azulgrana y que debería resultar clave en el hipotético caso de que el Huesca termine con opciones de jugar el ‘playoff’ de ascenso. Sin embargo, en la actualidad prima la realidad y la de Vinícius parece estar lejos de la titularidad.
Más allá de un mero cambio
Y es que apostar por uno u otro o por los dos juntos sobre el verde no es un simple cambio de fichas, ya que implica cómo se comportan los demás y cómo pueden llegar a rendir. Que Samu Sáiz, figura principal, es menos con Vinícius que con Borja, y en caso de que el brasileño se haga con la titularidad, Melero sería la mejor opción para ocupar la mediapunta, pasando Samu a un costado y entrando Sastre en el puesto del centrocampista madrileño, junto a Aguilera.
El ’14’ azulgrana necesita de un delantero que dispute las primeras jugadas, no demasiado móvil y que posea la característica de la presencia en área, algo parecido al ‘9’ más puro; que en lugar de quitarle espacio, se lo aclare. Con Vinícius, Samu se encontraría con lo contrario, algo que no le favorecería, y si hay alguien que podría jugar cerca del brasileño, hacer que éste rindiera lo máximo posible y que Samu no dejase de participar sería Gonzalo Melero.
El despliegue del ‘8’ con balón y su lectura del juego con el mismo evitarían el cortocircuito entre la medular y el puesto del ariete y serían el complemento perfecto para un Vinícius cuya presencia junto a Lázaro se antoja más que improbable.