Míchel compareció en rueda de prensa tensionado por la derrota contra el Sevilla. El entrenador recordó que hay seis equipos que se encuentran en una diferencia de tres puntos. Y por eso recalcó que “tenemos mucho tiempo por delante” para superar las adversidad que “estamos sufriendo” antes de subrayar que el Huesca “está muy vivo” pese a que ha sido una derrota “dolorosa”, dijo.
No cabe duda de que el Sevilla era un rival complicado. La necesidad de sumar la primera victoria se antojaba más difícil ante un equipo que, subrayó Míchel, es el que “más posesión (de balón) tiene en la liga”. Y, simplemente, hoy, el cuero fue del equipo andaluz, se lo quitó a un Huesca que tiene gusto por el balón y sufre sin él. Hoy le ha tocado defenderse ante un rival “muy bien trabajado, que tiene a uno de los mejores entrenadores del mundo y que cuenta con muchas variantes” en su juego, destacó.
Un Sevilla con posesión
El entrenador del Huesca reconoció que el Sevilla fue “superior en posesión” y eso se tradujo en que “no nos ha dejado jugar”. Míchel explicó que su equipo defendió bastante bien con cuatro jugadores por dentro. El objetivo era “tapar la zona central y defender el área y lo hemos hecho bien en la primera parte. El problema es que no hemos tenido el balón y con el 0-1 se acabó el partido”.
El técnico del Huesca alabó el trabajo y el tremendo desgaste de sus jugadores ante un rival del que se deshizo en elogios, especialmente, por la cantidad de alternativas que maneja en cada momento que lo necesita y que, al final, “ha ganado en un duelo en el área”. Un duelo que también tuvo el Huesca, con la ocasión de Sandro, y que no pudo concretar.