8 de marzo del 2020. Casademont Zaragoza perdía por 92-70 en el WiZink Center ante el Real Madrid en el último partido de Liga Endesa de la añorada normalidad. Era la séptima derrota de la temporada del equipo de Porfirio Fisac, que llegaba en la jornada 23. Nadie podía predecir que esa sería la última jornada de liga regular que se disputaría, debido a la pandemia del coronavirus.
8 de noviembre del 2020. Casademont Zaragoza caía en el último instante ante el Baxi Manresa en el Príncipe Felipe por 102-103. Un final aciago en un choque que parecía encarrilado con el 94-86. Es también la séptima derrota en Liga Endesa. La diferencia es que en esta ocasión ha llegado en la jornada 9.
Ocho meses de diferencia entre una fecha y otra. O, dicho de otra manera, la séptima derrota del curso 20/21 ha llegado cuatro meses antes que en la 19/20. Unos números demoledores. Ahora bien, tampoco se debe perder la perspectiva. La temporada 19/20, con la tercera posición en liga regular, estaba totalmente por encima de las aspiraciones. Es una gesta que tal vez nunca se repita y en ningún caso es un baremo coherente de comparación, ni se le pueden exigir esos registros al club.
Fisac, Ocampo y El Oveja
Porfirio Fisac dejó el listón altísimo a Diego Ocampo. Viniera quien viniera, iba a ser inevitable la comparación con su predecesor, y el gallego no supo sacar el mismo rendimiento que el segoviano a la plantilla. Ahora, desde el jueves pasado, Sergio Hernández ‘El Oveja’ es el elegido para reconducir el rumbo. Como ya señalaba el domingo por la tarde, necesita tiempo para poder trabajar con el equipo. Tiene todo el sentido del mundo, pero no es menos cierto que en el deporte profesional siempre se le va a exigir ganar desde ya.
Al margen, el banquillo no ha sido el único cambio que ha experimentado de una temporada a otra. La negativa del Real Madrid a ceder de nuevo a Carlos Alocén ha hecho mucho más daño del que parece. La electricidad y ritmo que imprimía el joven zaragozano al equipo, sobre todo en el contraataque, se echa de menos. Ahora, Casademont Zaragoza sufre en estático y cuesta verles sonreír sobre el parquet. La idea inicial de Fisac de utilizar a Dylan Ennis de base no llegó a aplicarse, principalmente por la bomba de humo del segoviano. Rodrigo San Miguel se quedó varias semanas como único base puro, hasta el fichaje de Luka Rupnik, quien demuestra ser un currante implicado, pero no es Alocén.
Sin Radovic ni Pradilla
Otro quebradero de cabeza ha sido la posición de ‘4’. Casademont Zaragoza decidía no pujar fuerte por la renovación de Nemanja Radovic, quien regresaba a UCAM Murcia. La idea inicial de utilizar en el ‘4’ a un Jonathan Barreiro renovado al alza (merecidamente) junto con un Jaime Pradilla que ya dio muestras de su capacidad en la Fase Final, brillando ante Gran Canaria. Esta idea también saltaba por los aires en el momento en el que Valencia Basket sacaba el cheque para llevarse a Pradilla. El problema para Casademont era doble, puesto que no solo se pierde a un jugador útil, sino que era cupo.
Al final, quien llegaba era Sagaba Konate, que apenas ha contado con minutos y es “un 4,75” según definió el director deportivo Pep Cargol. Quién sabe si, de haber sabido que el Valencia se iba a llevar a Pradilla, en ese caso se hubiera apostado fuerte por la renovación de Radovic. Tal vez nunca lo sepamos. El montenegrino siempre demostró un enorme carácter y simpatía con la afición, así como involucración con el proyecto. Veremos qué pasa con la cláusula de corte de Konate el próximo 30 de noviembre.
Javier Justiz sigue recuperándose de su operación en la rodilla y ha habido otras circunstancias sobrevenidas que han ido erosionando las opciones. La lesión de Vit Krejci en la pista del Real Madrid y la de Rasheed Sulaimon ante el AEK en la ‘Final 8’ han sido otros contratiempos.
Todo puede ser
Del 8 de marzo al 8 de noviembre. Puede parecer que se ha desmoronado el proyecto, pero esto es muy largo. El baloncesto da muchas vueltas y aún hay margen para todo. Es lo bonito del deporte, que es impredecible. Hay mimbres y personas más que preparadas en el Casademont Zaragoza para firmar una temporada digna en Liga Endesa y garantizar la competición europea el próximo curso. Y mientras tanto, la Basketball Champions League 20/21 sigue en curso, con el sueño de completar el trabajo que no pudo ser en Atenas. Hay cosas que cambiar, sí, pero para eso ya ha llegado Sergio Hernández. Confiemos en volver a ser el Casademont Zaragoza del 8 de marzo.