El parón navideño no ha detenido la actualidad en torno al Real Zaragoza. Con la plantilla de vacaciones, se han sucedido las noticias en la propiedad del Real Zaragoza. Al desplante en la Junta de Accionistas siguieron las comparecencias del presidente Christian Lapetra y, al día siguiente, la del director deportivo. Ayer se conocieron diversas informaciones que confirman que en el club se trabaja en dos facciones. Ambas negocian una venta por su cuenta. En el último capítulo, el de esta tarde, la Fundación 2032, mediante un comunicado, llama a la unidad.
La unidad que ahora reclama la Fundación 2032 quedó manifiestamente claro que no existe en el seno del club blanquillo tras la ausencia de Fernando de Yarza y Juan Forcén en la Junta de Accionistas del martes. El presidente quiso puntualizar que no era la primera vez que faltaban y se excusó en la agenda. Pero diversas informaciones apuntan a que se trató de un gesto simbólico para evidenciar el malestar de esa parte del consejo por la venta que negocia paralelamente la familia Alierta.
Una negociación de venta en cada bando
Según apuntaron ayer algunos medios como Heraldo de Aragón y AS, César Alierta a través de Sainz de Varanda y Uguet negocian la venta con el consejero y accionista del Betis José María Gallego, que actuaría como intermediario de una compra para la que necesitaría del músculo económico de fondos inversores, al parecer, mexicanos o norteamericanos.
Por otra parte, también durante las últimas horas de la tarde conocimos a través de El Periódico de Aragón que existe otra negociación abierta que gestionan De Yarza y Forcén, con el fondo inversor americano Ares Management, propietario del 30% del Manchester United.
El comunicado de la Fundación 2032
Ante la evidencia de división interna en el consejo de administración del Real Zaragoza, esta tarde la Fundación 2032 ha emitido el siguiente comunicado:
Desde que en el verano de 2014 la Fundación Zaragoza 2032 asumió la misión de salvar al Real Zaragoza y encauzar su futuro, la entidad ha conseguido estabilizar su situación financiera, a pesar de que se partía de unas condiciones económicas extraordinariamente difíciles que, de no haberse corregido, hubieran llevado al club a su desaparición. Al mismo tiempo, se ha trabajado, año tras año, para construir un equipo competitivo, con el deseo de ascender a la Primera División. Aunque este objetivo fundamental todavía no se ha alcanzado, el club renueva cada temporada dicha aspiración y agradece la confianza y el respaldo obtenido en todo el proceso por parte de aficionados, socios y abonados.
En ese contexto, la Fundación Zaragoza 2032 sigue trabajando para encauzar adecuadamente la situación económica y deportiva del Real Zaragoza y asegurar su futuro. En esa labor, la unidad demostrada por los accionistas a lo largo de estos años ha sido determinante para la consecución de los objetivos. Por ello, ante las diferencias que se han puesto de manifiesto entre los accionistas en los últimos días, entendemos que siempre tienen que imperar la serenidad y el sentido común, y que es forzoso recuperar la unidad y el entendimiento, anteponiendo los intereses del club a cualquier otra consideración.
Son muchas las dificultades por las que atraviesa la entidad, pero también son muchas sus fortalezas, entre ellas su identidad aragonesa. Por lo tanto, en ningún caso debería ponerse en peligro una raigambre que constituye parte indisociable del Real Zaragoza y que supone su razón de ser.
En estas fechas de Navidad y fin de año, la Fundación quiere asegurar a todos los socios, abonados y aficionados que continuará trabajando para devolver al Real Zaragoza a la posición societaria y deportiva que le corresponde por sus méritos y su trayectoria histórica.