El tudelano y el franco-camerunés, que tuvieron que salir de inicio por las ausencias de Manolo y Fran Mérida por sanción, no fueron capaces de llevar la manija del encuentro e, incómodos, fueron quienes más sufrieron.
Bambock ante el Oviedo | Foto: C.PascualSi algo no marchó como se preveía en el juego de la SD Huesca, eso fue el centro del campo. Manolo y Fran Mérida se perdían el encuentro ante el Real Oviedo por acumulación de cartulinas amarillas y Tevenet debía apostar por su pareja suplente de mediocentros. El técnico sevillano no optó por meter a Camacho en esa posición ni por hacer lo propio con Jesús Valentín, quien sí debutó en la segunda mitad pero como central.
Tanto Ros, más posicional como Bambock, dotado de un gran recorrido que le permite liberarse, fueron superados por la línea de centrocampistas del conjunto ovetense. Íñigo, que había sido titular en los últimos partidos del equipo altoaragonés pero no como medio, sino como lateral derecho -cubriendo la baja por lesión de Aythami-, se había perdido el enfrentamiento de Córdoba, cuando Tevenet apostó por darle el carril derecho a Óscar Ramírez. Bambock, igual que su compañero, tampoco disputó ni un minuto en El Arcángel, a pesar de que sí lo había hecho en los duelos anteriores.
Titulares dos semanas más tarde del choque de Tarragona, no sólo se vieron perdidos en la mayor parte del encuentro, sino que ambos fueron amonestados. Bambock vio la tarjeta amarilla a los cinco minutos del comienzo, y Ros lo hizo nada más empezar la segunda parte. El tudelano, con un papel menos protagonista, pasó más desapercibido que el franco-camerunés: Franck-Yves, quien no aportó en ataque, tampoco fue un seguro para sus defensores, pues perdió una gran cantidad de balones y provocó muchas faltas en contra, con el riesgo de haber acabado expulsado.
Esta vez, la pareja en la medular de la SD Huesca no cuajó. Bambock fue sustituido a poco de que acabara el encuentro por David Mainz, mientras que Íñigo disputó los 90 minutos. Para la próxima jornada, Tevenet recupera a sus mediocentros titulares, Manolo y Mérida. Sólo con ellos, el doble pivote y, el equipo, logra funcionar.
.
[ad name=”Policlinica”]