La SD Huesca atraviesa su particular crisis de resultados. Los desplazamientos a Valladolid y Vallecas se les han atragantado a los de Rubi. En el segundo, además de caer en un duelo directo (3-0), la imagen ofrecida resultó muy diferente a la habitual.
Esta temporada está siendo casi perfecta para los azulgranas. Sin embargo, los últimos dos encuentros han supuesto un bache en la buena trayectoria del líder. Y es que, por primera vez en lo que va de temporada, el Huesca se va de vacío en dos jornadas consecutivas. Cero de seis puntos posibles y seis goles en contra en dos partidos son un balance negativo al que no ha podido hacer frente un plantel aquejado por las numerosas bajas de jugadores importantes, especialmente en el segundo compromiso.
La abultada derrota en Vallecas ha sido también la primera por más de tres goles esta campaña y el primer partido en el que la SD Huesca no consigue al menos un gol desde la jornada 16, cuando cayó derrotado 2-0 en Granada. Para encontrar precedentes negativos similares hay que remontarse, en primer lugar, a la jornada 9 de la Liga 1|2|3 de la pasada campaña, hace 503 días, cuando el Huesca perdía 3-0 en el Iberostar ante el Mallorca.
Cabe destacar también que el cuadro altoaragonés no perdía dos encuentros seguidos recibiendo seis o más goles desde hacía 1887 días, en diciembre de 2012. Los resultados fueron dos derrotas, ante la UD Las Palmas (4-0) y el Córdoba (1-3). En abril de esa misma temporada los azulgranas llegaron a encajar 8 goles en dos partidos, al perder 5-1 ante el Real Madrid Castilla y ganar al Sabadell (4-3).
Esta racha negativa no es la primera que ha atravesado el Huesca en el presente curso ya que, antes de poner velocidad de crucero, el actual líder tuvo problemas para arrancar como un bloque competitivo en las primeras jornadas. La derrota ante el Numancia (1-0) en el debut liguero y las tres jornadas sin ganar, con empates ante Osasuna y Sevilla Atlético, además de una nueva derrota, contra la Cultural, constituyeron una pequeña crisis en el seno de la plantilla, que se resolvió con una posterior racha de 10 partidos sin conocer la derrota.
El margen mantiene intacto el sueño
Antes de afrontar las dos salidas lejos de El Alcoraz, Rubi insistió en la importancia del colchón de 11 puntos sobre sus perseguidores, y razón no le faltaba. A pesar de haberse recortado esta ventaja, ahora de 5 sobre el segundo y 6 sobre el tercero, el conjunto oscense sigue en lo alto de la tabla y con una oportunidad de volver a la senda de la victoria en su fortín ante el Almería.
La lista de bajas se ha reducido de cara al próximo encuentro, que se antoja clave. Volverán a estar disponibles ‘Chimy’ Ávila y Pulido tras cumplir sus respectivas sanciones y se espera el regreso de Vadillo o Akapo.