Seis incorporaciones durante este mercado de fichajes y de ellas, una que brilla con luz propia: Dwamena. El jugador ghanés aterrizó en el Real Zaragoza tras una temporada gris en el Levante en la que no tuvo la participación deseada. Desde la dirección deportiva zaragocista se le aseguró a Dwamena que iba a ser un jugador importante. Su rendimiento está respondiendo a esa expectativa que se había depositado en él.
Dwamena fue recibido con los brazos abiertos por Víctor Fernández en la concentración de Boltaña. El míster sabía que con el futbolista llegaba ese ansiado goleador que estaba esperando para capitanear el ataque del Real Zaragoza. Con un sonrisa, sacrificio y esfuerzo en cada entreno, pronto Dwamena se ganó el cariño de sus compañeros.
Conseguir el afecto de la afición también va por buen camino. En el primer encuentro amistoso que disputó ante el Peña Ferranca, el Partido de las Peñas, Dwamena ya anotó 5 goles. Repitió ante el Boltaña con otros cuatro y siguió su estela goleadora frente al Calahorra con dos goles. Unas cifras que hace tiempo no se veían en un futbolista del Real Zaragoza durante la pretemporada.
Dwamena, esfuerzo y compañerismo
Las facultades de Dwamena no se quedan solo en su capacidad rematadora. Ha demostrado ser un buen acompañante de Luis Suárez, pudiendo actuar también como un segundo delantero que inquieta a la defensa rival y proporciona buenos pases a sus compañeros en ataque. Su capacidad para encontrar espacios entre la defensa rival es otra de sus grandes virtudes.
Durante estos partidos de pretemporada, Dwamena ha dejado claro el buen entendimiento que tiene con sus compañeros, asimilando rápidamente los conceptos de juego que Víctor Fernández quiere inculcar. La unión entre Pombo y Dwamena ante el Calahorra nos ha dejado algunas de las mejores jugadas en ataque de esta pretemporada. Nadie asegura que podamos verles juntos una vez que la temporada comience, ante la posible venta del canterano. De momento, disfrutemos de lo que queda de pretemporada.