El Alcoraz despidió a sus futbolistas con una fiesta final con espectáculo de luces, fuegos artificiales y la presentación de todos los artífices del ascenso. Se cierra un año en casa que ha sido brillante con tan solo 2 derrotas en 21 partidos y un fútbol vistoso que ha cautivado a una categoría.
Tras 21 partidos ligueros, un ascenso histórico y una fiesta posterior para la posteridad, la SD Huesca ha bajado la persiana de El Alcoraz esta temporada. Aunque el resultado del encuentro no ha sido el esperado, ya que jugadores, cuerpo técnico y afición querían una victoria para ir a por el liderato de la Segunda División, la temporada en casa del Huesca ha sido de sobresaliente, el ascenso se ha fundamentado en el coliseo azulgrana.
Con el del Nàstic, los de Rubi solo han perdido 2 encuentros en toda la temporada en casa (0-2 con el Sporting de Gijón y ante el club tarraconense). Este registro únicamente ha estado superado por el Cádiz con 1 e igualado por el Tenerife, al que le queda un choque en el Heliodoro Rodríguez López. Así, los azulgranas cierran la liga como, de momento, el segundo mejor local de la categoría (solo podrá ser superado si Oviedo, Numancia o Granada ganan sus partidos de la próxima semana) con 45 puntos repartidos en 13 victorias y 6 empates para un total de 31 goles a favor y 14 en contra.
El resultado más abultado este curso han sido los dos 3-0 que endosó el Huesca a Lugo y Tenerife en la primera mitad del campeonato. Sin embargo, sin duda alguna, el partido más especial fue el derbi contra el Real Zaragoza. El 6 de noviembre del 2017, Melero y ‘Cucho’ por partida doble regalaban a la afición el primer triunfo oficial ante el Zaragoza en uno de los momentos más recordados por la parroquia altoaragonesa.
Ahora es tiempo para aprovechar el verano para poner guapo y elegante el feudo oscense y engalanarlo porque el próximo encuentro oficial que acogerá El Alcoraz será de Primera División. Casi nada.