HUESCA | El Alcoraz podría estar sin público en el partido del próximo domingo ante el Espanyol, según ha explicado la alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, a Aragón TV. “Nos arriesgamos a que el próximo partido se juegue sin público”, explicaba este sábado en Zaragoza. Orduna espera que las diferentes licencias que tiene que presentar la Sociedad Deportiva Huesca esté refundidas este lunes, que es cuando acaba el plazo. La alcaldesa ha reconocido que el club ha mostrado su colaboración y también que el Huesca es importante para la ciudad. Según la televisión autonómica, el Huesca va a presentar esos documentos este mismo lunes.
La noticia que adelantaba el Periódico de Aragón ha supuesto un nuevo batacazo para el entorno de la Sociedad Deportiva Huesca. Y desde que saltara la noticia, varias peñas del club han emitido comunicados denunciando la situación de gobierno de la entidad. Así, ‘Alcorazados’ denunció que “el club se está convirtiendo en un circo” y exige que “los actuales dirigentes reconsideren su enfoque y cedan la gestión de forma inmediata”. Por su lado, la Peña Moya ha mostrado su “preocupación y descontento con la actual gestión”. Además solicitan “ajustar la estructura no deportiva de manera inmediata” o “explicaciones claras”.
Consejo de Administración
Los comentarios en la calle y en las redes sociales coinciden y la crisis social que vive el club es clara. Este próximo martes habrá un Consejo de Administración en el que se tomarán nuevas decisiones. En el último Consejo de Administración se acordaron seis despidos y se esperan nuevas salidas que salpiquen a los responsables de la última bomba informativa que afecta a El Alcoraz. Los posibles compradores del club exigen que la estructura no deportiva sea similar a la que tenía el club en el año 2018, antes de que el Huesca ascendiera a Primera División.
Todo, absolutamente todo, indicaba que se estaba llevando a cabo una gestión desastrosa en todos los órdenes. Las declaraciones de Míkel Rico tras su salida debieron disparar todas las alarmas, pero pareció como si no hubiera pasado nada. Desde el tema de las camisetas tras el descenso y la falta de explicaciones por parte de la entidad se podía adivinar una absoluta dejadez, no solo en lo deportivo. Así hemos llegado a una desconexión preocupante del club con la afición, y una invasión del desánimo en la misma. Ahora nos enteramos de esta ausencia de una mínima diligencia en la administración de la entidad. El legado de dos temporadas en primera que se puede ir al garete. Pobre S.D. Huesca.