Quedan tres jornadas. Nava es la primera parada del Bada Huesca, que terminará en el Palacio contra el Bidasoa y la competición en la casa de Cuenca. El objetivo es evitar la plaza de promoción a División de Honor B, que ahora mismo ocupa Nava. La derivada es clara: el partido de este sábado va a ser duro y tenso. Y es que esta Asobal es así. Si hace tres jornadas la tropa de Nolasco miraba al norte, ahora lo hace al sur. Cuatro puntos separan a altoaragoneses de los segovianos. En medio, Puente Genil y Valladolid.
Y llegados a este punto todos se miran. Valladolid juega en Bidasoa y los cordobeses en Granollers. Los castellanos cerrarán la competición en Granollers y Puente Genil recibirá a Torrelavega. Antes, Valladolid jugará contra Cuenca y Puente Genil en Antequera. Nava lo hará contra Benidorm y Anaitasuna. Contra el galimatías, las matemáticas y las conjeturas lo mejor para el Bada Huesca será ganar este sábado al Nava de Zupo Equisoaoin.
Nolasco no muestra nada nuevo al decir que su equipo está en una zona “complicada”. Deja claro que hay “riesgo” producto de no haber conseguido los puntos necesarios para “alejarnos de donde nos encontramos”. Los dos puestos de descenso directo no le afectan, pero sí el de la promoción. A Nava viajará el equipo el viernes. A fecha de hoy con todos. Solo faltará Domingo Mosquera, que se recupera de la operación de cruzado. El resto concienciados de que Nava se lo va a poner muy difícil. “No les vale ni el empate”, entrecomilla con énfasis Nolasco.
Se espera un duro ambiente
Y el partido de la primera vuelta ya dejó claro cómo es el balonmano de Nava. Arrugarse contra los de Zupo no vale y allí la pareja arbitral tendrá que estar muy atenta en un ambiente, sobre el papel, hostil para los altoaragoneses. Nava es un equipo que juega muy fuerte, al límite. Y Nolasco insiste en la necesidad de los segovianos por ganar. “Ellos se juegan la vida desde hace tiempo. Perdieron de forma clara contra Puente Genil y empataron contra Torrelavega y Valladolid. Necesitan sumar los dos puntos. Y la lógica es que, en su casa, con su público tienen que quemar todas las naves y más ante un rival al que pueden meter en el lío”, afirma el preparador del siete altoaragonés.