Brutal. Cómo poner en letras la victoria del Bada Huesca en Torrelavega. Puede uno escribir lo que quiera, pero esta tarde, además de equipo, Dani Arguillas. Qué buena noticia que el capitán esté de dulce. En lo particular sacó la redonda en los momentos clave del encuentro. Ha sido tajante en los siete metros con los que se castigó al siete altoaragonés. Especialmente con 28-28 en el electrónico y Villoria listo para ejecutar. Antes, secó a Oswaldo con 28-27 en el marcador.
Toda pizarra, big data, estadísticas, números en definitiva, se caen cuando un jugador tiene su tarde, cuando está imperial, cuando sabe que pase lo que pase él está allí, y hoy, Arguillas ha sido capital dentro de un conjunto que vuelve a sacar su seña de identidad: equipo. Estos tipos tienen una fe inquebrantable. Enfrente un Torrelavega muy bien armado, con un portero como Mijuskovic que se encargó de arruinar muchos ataques. Llegó a parar la mitad de lo que le lanzaron y con otro compañero de puesto, Carlos Calle, que también motivó fallos en los lanzamientos.
Un equipo con fe
El Bada Huesca sigue como terminó. Entra en esta temporada como dejó la anterior. Le puedes golpear que allí sigue. La victoria es positiva porque ganar el primer partido de una competición siempre es importante, porque hacerlo fuera de tu casa es mucho mejor, porque sabe que, ocurra lo que ocurra están allí y porque tiene un evidente margen de mejora. En el primer acto, siempre fue a remolque; en el segundo también. En la primera parte llegó a posicionarse uno arriba, pero lo mejor era que siempre evitó que los cántabros se marcharan en el electrónico.
La segunda parte acosó, pero le costaba empatar en el electrónico. Tiró de casta y sus jugadores aparecieron en momentos clave. Atrás, como siempre, una roca. Bien con el 6:0 o con el 5:1. O era Adrià Pérez -otro tipo de esos que en defensa es un coloso- o era Miguel Malo -expulsado en una acción de ataque de Adrián Fernández- quienes empezaban a torpedear el ataque cántabro. Y con el 6:0 ya se sabe: casco, chaleco y trinchera.
Arriba, soluciones Mosquera en momentos muy concretos, Gucek, Montoya, Carmona, Hackbarth, Carmona, Suárez… Si erraban un lanzamiento lo intentaban después. Cada uno coló su golito en el momento justo para desesperar a un rival, que siempre fue por delante menos en el momento importante de cada partido: el final.
Ficha técnica
Torrelavega: Mijuskovic (p), Prieto (2), Alonso Moreno (1), Ramos (3), Casanova, Villoria (5). Siete inicial. Carlos Calle (ps), Adrián Fernández (2), Isidoro (4), Cangiani (2), Lombilla, Dani Serrano (3), Cangiani, Oswaldo (2), Czaplinsji (3), Colunga.
Bada Huesca: Tercariol (p), Hackbarth (5), Pére Arnau (3), Rodrigo Benites (1), Dijà (2), Gucek (2) ,Adrià Pérez (3). Siete inicial. Dani Arguillas (ps), Montoya (3), Carmona (3), Mosquera (3), Ian Pedro Moya, Suárez (2), Miguel Malo (2), Floris, Rubio.
Parciales cada cinco minutos: 3-2, 6-5, 8-7, 11-9, 12-12, 13-13 (descanso) 16-15, 19-18, 21-19, 24-23, 27-27, 28-29.
Árbitros: Macías de Paz-Ruiz. Excluidos Oswaldo (2) por Torrelavega; Adrià, Carmona, Gucek, Malo (roja) por el Bada Huesa.