HUESCA | Fabricio de Souza ya luce la camiseta del Bada Huesca, ya conoce a sus nuevos compañeros y ya entra en la dinámica del equipo. Tiene por delante lo que resta el mes de enero y el objetivo no es otro que cuando se reanude la segunda vuelta, la afición se pregunte porqué no llegó antes y, por supuesto, sea un elemento clave en la salvación del siete altoaragonés para que la próxima temporada siga siendo equipo ASOBAL. No hay más objetivo. Y el trabajo tendrá que ser con pico y pala, desde lo más hondo de la clasificación que es donde ancla el Bada Huesca, hoy, en la de los 30 años de la entidad.
El pivote brasileño ha ofrecido hoy sus primeras declaraciones como jugador altoaragonés gracias a su compatriota Teixeira y escoltado por su técnico, José Francisco Nolasco, que lo definió como un jugador “completo, porque puede hacerlo de forma equilibrada en ambas áreas por lo que no destaca más en un sitio que en otro”.
El jugador llega con el objetivo de darlo todo “sobre la pista y de la mejor manera posible”. Dijo que llega a un equipo con mucha tradición, sede de otros brasileños como Rodrigo Benites que le han hablado muy bien del club y no escondió que busca hacerse un nombre en Huesca de cara al balonmano europeo. De la misma forma espera ser un jugador capital en defensa para ser uno más en el objetivo de salir de la zona de descenso.
Más partidos, más ritmo
La temporada brasileña acabó en diciembre y, el nuevo pivote del Bada Huesca se mostró seguro de estar listo “lo más rápido posible” para ayudar al equipo en ese objetivo de salir de los puestos de descenso. Se va a encontrar con un ritmo de competición sensiblemente distinto al de Brasil –más partidos y en menos días- lo que, deslizó, le ayudará a coger antes el ritmo necesario para colaborar con el equipo.