Javi Díaz sigue cumpliendo años y su calidad es una de las claves de bóveda de este Cangas. El Bada Huesca tendrá a este ‘cuarentañero’ como la última posición de su juego. Muchos de los puntos del siete gallego están en su haber. Y si este viernes tiene una buena noche en el Palacio se lo pondrá difícil al siete altoaragonés. Es cierto que Cangas ha perdido a tres jugadores capitales en su juego de la pasada campaña. La marcha de Iglesias, Carles Asensio y Dani Fernández a ligas con mayores presupuestos ha quebrado su potencial, pero el pasado está para recordar.
Antes de llegar a lanzar a la portería de Javi Díaz, Bada Huesca deberá superar la defensa gallega. Y ya se vio contra Bidasoa que los 5:1 y sus variantes le dan dolor de cabeza. Contra los vascos, directamente la fiebre rompió el mercurio. Y por eso, esta semana Nolasco ha trabajado cómo desbordarla. Su debe es que le faltan tipos que tengan la verticalidad necesaria o, mejor dicho, muchos jugadores con el balonmano necesario para coger el camino correcto. También es cierto que al sistema hay que ponerle persona. Y no todos los 5:1 son iguales ni se tienen a los jugadores adecuados para hacerla en todo momento.
Para evitar problemas, la mejor receta será la de correr. Al final, todo pasa por el abc, que arranca con una defensa de granito que te permita correr y con no perder balones que permitan correr al contrario. Si Javi Díaz es una de las referencias del cangas bajo palos, por la pista su calidad se llama Juan del Arco, un lateral izquierdo con amplio pasado en el Granollers y que recaló en el equipo gallego tras pasar por Logroño y el Anaitasuna de Pamplona. Con ellos, una colección de jugadores entre los que destaca uno con pasado altoaragonés. Se trata del rumano Rares-Marian Fodorean con sus poco más de 200 centímetros y que estuvo un par de temporadas en la base del BM Huesca y en el que se depositó confianza para que llegara al primer equipo… pero eligió otros destinos.
Con dos equipos separados por tan solo un punto y que miran los puestos de descenso, el partido cobra más importancia ya que es el que cierra la primera vuelta y sumar los dos puntos, siempre tiene un factor psicológico importante, aunque quede todo un mundo por jugar.