ZARAGOZA | Se intentó hasta el final, pero no se dio. Este pasado fin de semana, el BM Dominicos disputó la final del Campeonato de España infantil de balonmano ante el Barcelona en el pabellón Salduba-Perico Fernández (Zaragoza). El equipo aragonés lo intentó con uñas y dientes, pero finalmente cayó de pie por 23-30 ante un conjunto catalán que fue por delante a lo largo de todo el choque, pero que en ningún momento pudo relajarse ante la presión y competitividad aragonesa.
El conjunto maño sabía que la tarea era cualquier cosa menos sencilla, pero tras vencer el año pasado en el Nacional celebrado en Zaragoza, este curso parecía uno de los equipos más afilados y peligrosos del torneo. De hecho, el conjunto aragonés comenzó la fase de grupos con dos victorias, venciendo al BM Ciudad Imperial y al Agustinos Alicante. Estos dos triunfos le daban la clasificación a la semifinal, a pesar de que en el tercer encuentro perdieron ante el Barcelona 15-41, a quien posteriormente verían en la final.
En las semifinales disputadas este pasado sábado, el conjunto zaragozano firmó una actuación estelar al derrotar al Granollers por 35-33 y plantarse en la final ante un viejo conocido, el Barcelona.
En la final, los de Carlos Colomer hicieron un gran encuentro, pero el Barcelona no se arrugó en ningún momento, no dejando adelantarse al Dominicos. De hecho, al descanso el partido quedó en 11-15, pero en la segunda parte el conjunto catalán sacó la artillería pesada para no dejar lugar a la sorpresa y llevarse el partido por 23-30 y el título nacional.
Pese a ello, el Dominicos ha demostrado ser una de las canteras más prometedoras del balonmano español y ha dejado el nombre de Aragón y Zaragoza en la cota más alta de la disciplina base.