Sin hacer mucho ruido, a sus treinta años, David Ferreiro alcanzó el pasado sábado ante el CD Leganés la centena de partidos oficiales portando el escudo de la SD Huesca. El gallego está siendo uno de los mejores jugadores en el debut de los altoaragoneses en Primera División, a pesar de la mediocre primera vuelta que ha firmado el club. El extremo se deja la piel en cada partido y es un amuleto para el Huesca, ya que siempre que anota el equipo gana.
De los 100 encuentros oficiales que ha disputado, 78 han sido en Segunda, 18 en Primera y 3 en Copa. Al igual que con Rubi la pasada temporada, con Leo Franco y Francisco tampoco contaba en el inicio, pero poco a poco se ha ido haciendo vital. Un seguro de vida para el andaluz porque siempre cumple. La afición reconoce el buen trabajo del gallego, al igual que la directiva, quienes hace unas semanas renovaron el contrato con Ferreiro para vincularle a la entidad azulgrana hasta 2021.
En total, el extremo ha anotado 10 goles y ha repartido 13 asistencias en sus tres años en la capital altoaragonesa. Durante su primer año, en la temporada 2016/17 con Anquela al mando del timón azulgrana, fueron 6 goles y 2 asistencias logradas por Ferreiro. El curso del ascenso marcó 3 tantos y dio 6 asistencias. Mientras, en lo que llevamos de campaña en la máxima categoría del fútbol español, el gallego ha anotado un gol y regalado dos asistencias.
Ferreiro cerró el 2018 siendo el jugador del Huesca que más partidos disputó con los azulgrana, participando en 36 de los 41 encuentros llevados a cabo por el Huesca entre Primera y Segunda. A principio de año, el propio Ferreiro ya declaró sentirse un jugador “muy importante” y aprecia que el club deposita una gran confianza en él.