Después de tres años, el Club Voleibol Teruel regresa a la Champions League pisando fuerte. La primera toma de contacto ha tenido lugar esta tarde contra el equipo belga Lindemans-Aalst, al que han vencido por un 3-0, tras un encuentro muy reñido donde ambos equipos han medido fuerzas. Después de dos primeros sets muy igualados, los de Miguel Rivera, han obtenido una amplia ventaja en la tercera manga que les ha permitido acabar con holgura un partido que deja muy buenas sensaciones de cara a la vuelta.
El encuentro ha comenzado con el ambiente festivo que envuelve los grandes partidos. Mientras el recién estrenado himno sonaba por todo el pabellón, la marea naranja no dejaba de aplaudir y vitorear a su equipo. El primer set ha comenzado con el marcador en contra para el conjunto naranja debido a una mala recepción. La cosa ha continuado muy ajustada entre ambos equipos, con los belgas adelantados por uno o dos puntos en el marcador, pero la escuadra turolense no han bajado los brazos y una defensa sólida y consistente del capitán Thomas y del nuevo fichaje, Miki Fornés, ha hecho que los naranjas se impusieran con un 25-19 en esta primera manga.
El segundo set ha transcurrido de manera muy similar al primero, con la ventaja de los visitantes al principio y un posterior tira y afloja en el que los equipos empataban a puntos continuamente. Pero varios tantos decisivos de Thomas y los potentes remates de Villena han puesto por delante a los de Rivera una vez más y han terminado el set con un igualado 25-22, gracias a un remate de Balsa imposible de gestionar para los visitantes.
La balanza ha terminado por inclinarse a favor del conjunto naranja en el tercer y último set, en el que la escuadra aragonesa ha logrado una diferencia de hasta 8 puntos en el marcador, lo que les ha permitido obtener un holgado 25-17 para cerrar el encuentro.
Con el pabellón en pie, los jugadores del CV Teruel han celebrado como si de una final se tratara esta victoria que los acerca un poco más al sueño de la Champions League. Sin embargo, Rivera ha recordado al final del partido que continúan con “los pies en el suelo” y que aun queda trabajo por hacer. En cualquier caso, las impresiones son buenas tanto para técnicos como para jugadores, así lo ha dejado ver el capitán del equipo Thomas Ereu que se ha mostrado “muy contento con la victoria y con el trabajo que se ve reflejado en el campo”. La vuelta de este enfrentamiento será el próximo 17 de octubre en la ciudad belga de Aalst, donde los naranjas solo necesitarán dos sets para superar la primera fase de la ronda eliminatoria.