Según publica hoy el diario La Razón, la Fiscalía Anticorrupción pide dos años de prisión y multa de 1.930.000€ para Jorge López, por delito de corrupción deportiva. El Ministerio Público considera que López tuvo un papel activo en el presunto amaño del partido entre el Levante y el Zaragoza, disputado el 21 de mayo de 2011 en Valencia. En aquel encuentro, el Zaragoza obtuvo la victoria por un gol a dos, evitando su descenso a la Segunda División de la Liga Profesional.
Los argumentos del amaño
El juicio por este presunto amaño de partidos comenzará el próximo día 3 de septiembre en la Ciudad de la Justicia de Valencia. «Una vez disputada la última jornada de la Liga de Fútbol, el Real Zaragoza se encontraba clasificado en el puesto 18 con 42 puntos. De tal forma que debía ganar el último partido de la competición oficial para no descender de categoría, con los perjuicios económicos y deportivos que ello suponía, especialmente los primeros (…) dado que una vez finalizada la liga se vio abocado a presentar concurso de acreedores por su nefasta situación económica».
Continúa el informe explicando que «frente a dicha situación deportiva y económica del Real Zaragoza, el Levante había asegurado la permanencia en Primera División. Por ello, para dicho club era intrascendente el último partido que debía disputar en la temporada, lo que allanó el camino de amañar dicho encuentro con los jugadores del Levante. Y es que, los jugadores obtenían un beneficio económico extra sin perjudicar deportivamente al club».
El fiscal señala igualmente que «se decidió alterar el resultado del encuentro y garantizar una victoria. El presidente del Consejo de Administración del Real Zaragoza, Agapito Carmelo Iglesias, y los consejeros Francisco Javier Porquera y Francisco José Checa, acordaron con el director deportivo del club, Antonio Prieto; el entrador, Javier Aguirre, y los capitanes Gabriel Fernández, Leonardo Daniel Ponzio y Jorge López, con el consentimiento y aceptación del resto jugadores de la plantilla, pactar con los jugadores del Levante. De esta forma, los granotas se dejarían ganar el partido a cambio de obtener una recompensa económica cifrada en 965.000 euros».
El pago de los presuntos sobornos
La dinámica utilizada para el pago de los sobornos fue la siguiente: «el acusado Agapito Iglesias dio orden al acusado Francisco Javier Porquera Pérez, director Financiero del club. Su misión era la de transferir los días 17 y 19 de mayo de 2011, dos días antes del partido, de la cuenta del Real Zaragoza determinadas cantidades a las cuentas de Antonio Prieto, Javier Aguirre y de nueve jugadores más del Real Zaragoza».
Continúa el fiscal que «para satisfacer el acordado pago del soborno, los días 19 y 20 de mayo los acusados entrenador, director deportivo y jugadores del Zaragoza extrajeron en efectivo de sus cuentas las cantidades recibidas del Real Zaragoza. Después las entregaron a los jugadores del Levante antes de la disputa del partido de fútbol en un lugar no determinado. La extracción fue realizada por los acusados en las respectivas oficinas bancarias».
El Real Zaragoza ganó el partido por dos goles a uno y eludió el descenso de categoría. El nuevo director deportivo del Valencia, Jorge López, al igual que otros jugadores, recibió 125.220 euros, que comprende los 90.000 euros recibidos para la compra del partido y los 35.220 por la permanencia.
“Sigue sin haber ética empresarial en el club”
La Fiscalía, según el medio de prensa La Razón, hace alusión en su informe a que el Zaragoza «a pesar de la colaboración que ha prestado en la instrucción por los nuevos dirigentes, ha mantenido como trabajador a uno de los acusados, José Checa. De tal forma que no se ha desarrollado en el seno de dicha entidad una verdadera ética empresarial». Tal apreciación sería de idéntica aplicación, al Valencia CF.