ZARAGOZA | El Real Zaragoza se mide al Cartagena en la segunda estación de la temporada, en un duelo en el que pretende mantener la sonrisa y el color que trajo de Cádiz. Mientras la vista se disipa también en el mercado, el fútbol será el único foco en Cartagonova. Enfrente estará el equipo del Pitu Abelardo, que pretende mantener su perfil competitivo, dolido por la derrota ante el Burgos.
Las llegadas de Sipcic, Ríos Reina, Guerrero o Escriche le añaden recursos a un equipo que soporta hoy el trance de perder a un técnico distinto: autor de un milagro y de frases para el recuerdo. A Julián Calero le ha seguido Abelardo, un clásico del fútbol español. Lo fue como futbolista y al día siguiente ya parecía serlo en los banquillos. Menos longevo en sus equipos en la última faceta, para su Cartagena busca una receta humilde, llena de oficio, que le sirva para mantenerse en Segunda División. Las claves del equipo pasan por Luis Muñoz, Jairo Izquierdo, Musto, Guerrero o un viejo rockero como Alfredo Ortuño.
El Real Zaragoza llega aplicado, con Víctor convencido de que el grupo progresa en conceptos claves: la intensidad en la presión, el ritmo de balón y la ambición de todos. El mercado estresa pero no desvía la atención de un grupo que parece llevar una progresión sensata, con un rostro ya distinto del que se vio en el curso pasado. A la espera de que la apariencia definitiva se complete, el técnico confiará en armas similares a las que se vieron en Cádiz.
Mario Soberón ha deshecho una maldición en la delantera y su mezcla con Bazdar toma fuerza. Vital y Lluís López formarán la zaga, a la espera de que Kosa se incorpore al grupo la próxima semana. En ese lugar le acompañará pronto Enrique Clemente, pero esa no es la historia de mañana. En la de mañana y en todas las que lleguen, Keidi Bare tendrá un papel esencial, con las riendas de todas las cosas. La duda está en ver si Víctor decide continuar con Marc Aguado en la base del juego o si Toni Moya, ya sin molestias, ocupa un sitio a su lado.
Los dos perfiles tienen nombre, en unas dobles parejas que Tasende forma con Liso y Calero hoy con Bermejo. El sitio del 10 en este inicio de temporada define la provisionalidad que tiene el fútbol, capaz de hacer al amigo enemigo en cuestión de una sola oferta. La lesión de Aketxe es la nota más amarga de la semana, mientras el regreso de Cristian Álvarez a la convocatoria será siempre un motivo de alegría. Justo para formar de titular, Poussin cubrirá la baja de Femenías en lo que algunos ven como una moneda al aire.
No puede haber especulación en un partido que parece hecho a la medida de la categoría. Víctor Fernández le pide a los suyos la misma ambición que demostró el Zaragoza en su estreno, una personalidad arrolladora y emparejarse también en el acierto. El Real Zaragoza se mide al Cartagena en la segunda estación del curso, en el primer lunes de la temporada. En un duelo en el que no se admiten distracciones, sin otro enfoque que el del fútbol.
Posibles alineaciones:
FC Cartagena: Pablo Cuñat; Aguirregabiria, Alcalá, Sipcic, Ríos Reina; Musto, Luis Muñoz, Andy; Mini, Ortuño, Jairo Izquierdo.
Real Zaragoza: Gaëtan Poussin; Iván Calero, Lluís López, Bernardo Vital, Dani Tasende; Toni Moya, Keidi Bare, Sergio Bermejo, Adrián Liso; Mario Soberón, Samed Bazdar.
Muy buen análisis, Jorge, como siempre. La baja de Ager Aketxe es la crónica de una lesión anunciada. Todas las incorporaciones de jugadores que hacen pretemporada de manera atípica, como el caso de jugadores (como Aketxe) que quedan libres (voluntaria o involuntariamente) sin equipo, tienen que pagar el peaje de la adaptación al ritmo de entrenamientos del equipo (un mes llevaba ya el equipo entrenando con intensidad). Por mucho que el jugador sea muy profesional, no es lo mismo entrenar sólo con un preparador que hacerlo con el resto de jugadores al ritmo que marca todo un equipo.