La SD Huesca ha puesto fin a sus vacaciones de Navidad con el regreso a los entrenamientos para preparar el próximo enfrentamiento liguero, que tendrá lugar el sábado 4 a las 20 horas en el Martínez Valero de Elche. Los azulgranas completaron ayer en El Alcoraz la primera sesión de la semana y esta mañana se han vuelto a ejercitar ante una mirada muy especial: la de todos los niños y niñas que han asistido al IES Pirámide para conocer de cerca a los futbolistas.
Ya con Josué Sá a las órdenes de Míchel, el gran ausente ha sido Shinji Okazaki, el más esperado por los jóvenes aficionados. El ariete nipón todavía no ha podido regresar a Huesca debido a problemas con su visado. Tampoco se han entrenado sobre el verde Ivi López y Doukouré, que sigue con su proceso de recuperación.
Pese a ello, y después de una sesión marcada por la dinámica de partidos reducidos, los jugadores de la SD Huesca se han acercado a firmar autógrafos a los seguidores, quienes no han dudado en fotografiarse con cada uno de ellos. El acto ha transcurrido con absoluta normalidad y la felicidad de todos los pequeños en fechas tan señaladas, cuyos ídolos esperaban pacientes para que todo fiel aficionado se marchara con una sonrisa.
“Se nota el calor de la gente”
Si ayer Pulido comparecía ante los medios de comunicación, hoy Juan Carlos Real valoraba la presencia de los aficionados azulgranas que se habían acercado a conocer a los futbolistas. “Es muy agradable. Se nota el calor de la gente, de los niños… Estamos contentos por la afición”.
El gallego comentaba que el vestuario está “con mucha ilusión para todo lo que viene” e indicaba que “estamos en un buen camino, tenemos muchas esperanzas puestas”. Si bien reconocía que “mejorar los números fuera de casa es la tarea pendiente, en cuanto a posición hemos sido bastante regulares, hemos estado arriba desde el principio“.
En cuanto a su aportación, Juan Carlos se encuentra “muy contento” y desea que todo siga como hasta hora para ayudar a conseguir los objetivos a final de temporada.