El Club Ciclista Oscense Huesca La Magia ha comenzado el mes de agosto con dos duras pruebas en tierras vascas. El sábado, en Oiartzun, el equipo participó en la LXXIV Xaniesteban Saria. Una prueba en la que el cuadro oscense buscó protagonismo a pesar de las caídas que rompieron la carrera. Nehuén Bazán (14º) y Pablo Clavero (38º) entraron en el grupo de cabeza que disputó el sprint final.
Los resultados supieron a poco y la escuadra buscó mejorar el martes, en la XLV San Román Saria de Muxika. Más de 130 kilómetros en los que de nuevo la dureza fue la tónica dominante. Solo unos 60 corredores, de los 180 que tomaron la salida, lograron terminar la prueba. Nehuén Bazán, en el grupo perseguidor del que finalmente se hizo con la victoria, volvió a ser el mejor clasificado del equipo. Dos carreras más en territorio vasco que suponen una valiosa experiencia para los más jóvenes, que continúan sumando kilómetros en una categoría muy exigente antes de afrontar la carrera de casa.
Por otra parte, el Club Ciclista Oscense sigue inmerso en la preparación de su Gran Premio San Lorenzo, que se disputará el próximo 15 de agosto en la capital altoaragonesa y que reunirá de nuevo a los mejores equipos del pelotón. Una cita que llega tras dos años de pandemia y que recupera su recorrido habitual de casi dos kilómetros y medio por las calles Joaquín Costa, ronda Montearagón, calle San Juan Bosco, Ronda Montearagón, Ronda Misericordia, Ronda Agustinos, Paseo Lucas Mallada, Calle San Juan Bosco.