El Huesca Rugby disputó su segundo partido en la regional aragonesa contra el Ejea Club y el Gigantes de Navarra dos clubes unidos en un único equipo por las ganas de jugar al deporte oval. El Ejea es un histórico del rugby aragonés. Incluso ha llegado a jugar en categoría nacional. El partido se celebró ayer domingo, en el campo de la Universidad, antigua Residencia de Niños.
Abrió el marcador el Ejea/Gigantes con una jugada de sus tres cuartos tras varios errores de placaje de los altoaragoneses. Esta circunstancia fue repetitiva durante todo el encuentro (0-7). En la siguiente jugada volvió a marcar el equipo visitante aprovechando esta vez la flaqueza mental de los locales (0-12).
Contundente el combinado Ejea/Gigantes de Navarra
A partir de aquí el partido cambió. El Huesca arrimó el hombro y tras una jugada de inercia, Fraga logró ensayar (5-12). En la siguiente estuvo cerca de ensayar el equipo verdiblanco. Sin embargo, un error de concentración hizo que el jugador oscense se pasara la línea de marca. Fue una decepción que no pudieron superar los locales que con el tiempo cumplido volvieron a encajar un nuevo ensayo (5-17).
Tras el descanso, el partido se reanudó con cambios y con ritmo por parte de los altoaragoneses, pero una indisciplina hizo que Guillotinas fuera expulsado durante diez minutos. Un tiempo que el equipo visitante aprovechó para marcar dos nuevos ensayos (5-27). Los cambios motivaron a los verdiblancos que tras varias acciones de melé consiguieron ensayar (10-27) y posteriormente un robo de Binaced recortó todavía más el marcador (15-27).
El problema es que en un nuevo fallo de placaje del Huesca Rugby, el Ejea Club/Gigantes de Navarra rompió la línea defensiva oscense (15-32). Al final y con el pundonor que caracteriza a todos los equipos del Quebrantahuesos Rugby Club, el Huesca terminó empujando al equipo rival anotando un nuevo ensayo con transformación (22-32), que fue el resultado final.