Cuando finalizó la décima jornada del Grupo II de Segunda División B, la SD Huesca sumó su cuarta derrota esta temporada y acumuló doce puntos perdidos, todos estos fuera de casa.
El Huesca perdió su primer partido esta temporada frente al Amorebieta (2-1) | Foto: sporthuesca.com – C.PascualLos números de la SD Huesca en estas diez primeras jornadas son: 4 victorias, 2 empates y 4 derrotas. Centrándonos en las derrotas, tienen algo en común: todas se han producido fuera del Alcoraz. En casa, el equipo de Luis García Tevenet presenta una imagen muy diferente a la que muestra lejos de su feudo. Sólo ha conseguido vencer en un desplazamiento, en Leioa (0-2) frente a un equipo recién ascendido desde Tercera División con numerosas bajas por lesiones y sanciones. El análisis de las diferentes derrotas es el siguiente:
Frente al Amorebieta, en el primer partido a domicilio, los locales consiguieron adelantarse gracias a la pillería de Joseba Arriaga, que ejecutó un libre directo por debajo de la barrera azulgrana y batió a Dani Jiménez. Cuando Camacho logró el empate (de penalti), la defensa altoaragonesa cometió otra pena máxima que permitió que el conjunto vasco marcara el 2-1 final.
Contra el Barakaldo, entonces líder del grupo, una rabona de Gerardo en los primeros cinco minutos del partido, cuando el equipo oscense estaba despertando, puso por delante a los locales ante la incapacidad de los oscenses de generar su fútbol e igualar la contienda.
Contra el Socuéllamos, otro equipo recién ascendido, se comenzó ganando gracias a un gol de Camacho pero los locales aprovecharon la fragilidad defensiva oscense en las acciones a balón parado y remontaron el encuentro. El capitán azulgrana recortó distancias con un poderoso cabezazo, pero Calle transformó un penalti cometido por Íñigo Ros en la recta final del choque para darle finalmente la victoria a los ciudadrealeños.
La última derrota se produjo el pasado domingo frente al Real Madrid Castilla. En una primera parte igualada el Huesca pudo irse con ventaja al descanso, pero la mala puntería de sus atacantes lo evitó. En la segunda mitad el primer filial madridista salió más enchufado y acorraló a una SD Huesca que pudo irse goleada de no ser por las brillantes intervenciones de Dani Jiménez y la falta de puntería de los atacantes blancos. Medrán remató dentro del área un balón centrado desde la izquierda aprovechando una falta de marcaje.
El próximo desplazamiento que realizará el equipo oscense será de nuevo a Madrid, para visitar al primer equipo filial del Rayo Vallecano que hasta la fecha, como local, ha conseguido tres victorias y dos empates.