Los azulgranas visitan este viernes el Estadio José Zorrilla, sinónimo de irregularidad visitante en su historia reciente. 2 victorias y 4 derrotas en 6 partidos entre Segunda, Tercera y Copa del Rey son el balance del equipo oscense en el feudo vallisoletano.
Las visitas a Valladolid tras la vuelta a la categoría de plata del fútbol español en 2015 se han saldado todas ellas con victoria. En la temporada 2015/16, con la permanencia en juego, la SD Huesca vencía por la mínima y con diez tras la expulsión de Franck Bambock. El autor del único gol que subió al marcador fue Darwin Machís. La pasada campaña el triunfo (1-2) llegó tras remontar el tanto inicial del actual jugador del Rayo Vallecano, Raúl de Tomás, con goles de Camacho y Samu Sáiz, de penalti.
Sin embargo, antes de la presente etapa en Segunda, los enfrentamientos se saldaron con derrota y ningún gol a favor. El primero, por 2-0 en la 2010/11 y, el segundo, por 3-0 el siguiente año. Eso sí, ante una plantilla que lograría el ascenso a la máxima categoría del fútbol español con Miroslav Djukic a los mandos, venciendo en la final del ‘playoff’ a la AD Alcorcón, entrenada por el extécnico azulgrana Juan Antonio Anquela.
Fuera de la Segunda División existen otros dos precedentes en Tercera y Copa del Rey. El primero data de la temporada 1970/71 con victoria local (1-0) y, el segundo, de la tercera ronda de Copa en la temporada 2010/11, con idéntico resultado.
A pesar de ser la representación más clara de la irregularidad en la categoría, el Real Valladolid no suele fallar en casa. Los hombres de Luis César Sampedro han cosechado 4 victorias y una derrota en sus últimos 5 partidos como local, cediendo puntos únicamente ante el CD Numancia a comienzos del pasado mes de diciembre. Es también el octavo mejor local de la categoría, con 28 puntos. 9 victorias, 1 empate y 3 derrotas constituyen un balance bastante positivo en un Zorrilla que la SD Huesca, en su condición de tercer mejor visitante de la Liga, tratará de conquistar.