Sin duda alguna, desde que ascendiese a Primera división en el año 2009, el Real Zaragoza ha vivido la peor etapa de su longeva historia. Durante los años diez (2010 – 2019), el equipo maño tan solo ha jugado en la máxima división del fútbol español tres años y seis meses; los seis años y medio restantes los ha vivido en el infierno de Segunda. Además en estos años, el Real Zaragoza se asomó al precipicio de la desaparición debido a su crítica situación económica. A día de hoy, tras enlazar buenas decisiones tanto en el apartado deportivo como económico, el conjunto del león ha enderezado el rumbo de regreso a la Primera división de cara a unos, esperemos, felices años 20.
Todo este conjunto de situaciones han servido para disfrutar y sufrir a decenas de jugadores que han vestido la elástica zaragocista en estos diez años. Gracias a las respuestas obtenidas en las encuestas realizadas en Twitter (@sportaragon_com), formamos el que ha sido el once de los años 10:
Portero: Cristian Álvarez
Lalo Arantegui lo trajo a Zaragoza desde las montañas argentinas en el 2017 tras haber jugado en el Espanyol, Rayo Vallecano, San Lorenzo de Almagro y Cerro Porteño. Con las dudas existentes en su fichaje y haciendo poco ruido se fue haciendo un hueco en la portería del Real Zaragoza. Desde que el rosarino se afianzase en la meta maña, su papel en las últimas tres temporadas ha resultado crucial en el rendimiento del equipo. Tras dos años y medio en Zaragoza y 88 partidos, Cristian se ha convertido en una entidad divina en La Romareda y sus paradas siempre tendrán un hueco en los anales zaragocistas.
Lateral derecho: Carlos Diogo
El uruguayo defendió el escudo del Real Zaragoza desde el 2007 hasta el año 2011, cuando se desvinculó del club. En el 2014 los caminos de Diogo y el Zaragoza se volverían a unir. Sin embargo, debido a molestias físicas, el lateral derecho anunció su retirada a mitad de temporada. Carlos Diogo era potencia y carácter. Quizá en las dos últimas temporadas que defendió la elástica blanquilla durante los años 10, su rendimiento no fuese el que ofreció cuando aterrizó en Zaragoza, pero el sacrificio y experiencia del lateral uruguayo fueron fundamentales en la permanencia del equipo en los últimos años en primera.
Lateral izquierdo: Diego Rico
Su irrupción en el Real Zaragoza fue en la primera temporada en Segunda. El canterano zaragocista de origen burgalés ofreció un notable rendimiento en las tres temporadas que completó como titular indiscutible en el lateral izquierdo aportando un necesario punto de ambición. Su gran capacidad física, que en ocasiones le ayudaba a rectificar los errores defensivos que pudiese cometer, junto a una gran presencia en área contraria, le afianzaron en el puesto. En el 2015 a punto estuvo de ascender aportando un importante gol en la ida de la final del playoff frente a Las Palmas. Sin embargo, se despidió del Zaragoza con la sonada derrota contra la Llagostera.
Central: Jesús Vallejo
El canterano zaragozano saltó del juvenil al primer equipo debido a los escasos efectivos que contaba el Real Zaragoza a inicios de la temporada 2014-2015. Su debut en Huelva sorprendió a propios y a extraños ya que la solvencia y la claridad que ofreció Vallejo no correspondían a la de un chaval de 17 años. Desde ahí, su crecimiento fue multiplicándose cada partido que jugaba hasta acabar convirtiéndose en el capitán del equipo en su primera temporada como profesional, en la que rozó el ascenso. Su excelente rendimiento le llevaría a fichar por el Real Madrid, que le cedería un año más al Real Zaragoza. La segunda y última temporada no fue tan buena como la primera debido a las numerosas lesiones. Su sacrificio y calidad mostrada en el equipo que le vio crecer aún perdura en la mente de los aficionados.
Central: Matteo Contini
El central italiano llegó al Real Zaragoza en el mercado de invierno de 2010 procedente del Nápoles. Jugó temporada y media en Zaragoza ofreciendo junto a Jarosik cierta fiabilidad atrás, consiguiendo el objetivo del salvar la categoría. De sangre caliente y con un gran temperamento se adueñó de un puesto en la zaga zaragocista durante su paso por la capital del cierzo.
Mediocentro: Gabi Fernández
Seguramente haya sido el mejor jugador que ha vestido la camiseta del Zaragoza en los últimos diez años. Desde su llegada en el 2007, sintió la camiseta y la defendió como el que más. Su importancia en el juego fue in crescendo cada temporada que pasaba siendo uno de los principales estandartes del equipo. En la temporada 2010/2011 anotaría la importante cifra de diez goles, dos de ellos en el último partido de liga frente al Levante para sellar una sufrida permanencia. Tras haber disputado un total de 137 partidos con la camiseta del Real Zaragoza, completó una excelente carrera con el Atlético de Madrid, logrando un Liga, una Copa del Rey y alcanzando dos finales de Champions. Un jugador de época.
Centrocampista: Ander Herrera
El hijo pródigo del Real Zaragoza. El mejor representante del zaragocismo allá por donde va. Su marcha al Athletic en 2011 fue toda una necesidad para sanear unas empobrecidas cuentas. Sin embargo, las tres temporadas que disputó el canterano con el primer equipo le sirvieron para hacerse un nombre en el fútbol español. Un jugador diferencial que unía su tremenda clase con la pasión y conocimiento de lo que es ser jugador del Real Zaragoza. Posteriormente se convirtió en jugador de todo un Manchester United y actualmente forma parte del elenco de estrellas del Paris Saint-Germain. “El Real Zaragoza será lo que quiera su gente”- Ander Herrera.
Medio ofensivo: Víctor Rodríguez
El mediapunta catalán llegó en el 2012 para jugar en el filial. No obstante, su calidad no pasó desapercibida para Manolo Jiménez y acabó siendo una pieza fundamental en el ataque zaragocista de la 2012/2013. Con Hélder Postiga creó una gran conexión que llevó al equipo a situarse en la zona tranquila de la tabla durante la primera vuelta. Sin embargo, el drástico bajón del equipo en la segunda parte del campeonato acabó con el Zaragoza en la última posición. Su descubrimiento y su gran nivel ofrecido durante esa temporada fue de lo poco rescatable de aquella campaña. Durante el primer año en segunda se quedó en el equipo y su aportación no fue tan notable que en su primer año como zaragocista.
Extremo izquierdo: Ángel Lafita
Sin él no se entenderían las dos últimas permanencias del Real Zaragoza en Primera. Desde su banda izquierda se generaban las mayores jugadas de peligro del equipo; no destacaba por unas grandes cifras goleadoras pero muchos de sus goles fueron decisivos en el devenir del equipo, como el anotado frente al Racing de Santander en la 2011/2012 que culminaría una remontada de puntos durante la segunda vuelta memorable. Un zaragocista de pura cepa que se dejó todo por el equipo de su ciudad.
Extremo derecho: Manu Lanzarote
Si por algo ha destacado el Zaragoza durante su periplo en Segunda ha sido por haber contado con numerosos jugadores de una alta capacidad técnica. Y el caso de Manu Lanzarote es de los más significativos. Su pierna izquierda era todo un guante y su golpeos a balón parado hacían levantar a toda La Romareda. Llegó al equipo en el mercado de invierno de la 2015/2016 para reforzar la zona de tres cuartos de campo y anotó cinco goles en media temporada. Su segunda temporada la empezó como un tiro anotando varios golazos pero su rendimiento se fue diluyendo con el paso del tiempo.
Delantero: Borja Iglesias
Borja no era de la cantera ni era maño. De hecho se encontraba cedido por el Celta en su única temporada en Zaragoza. Sin embargo, pocos jugadores han sentido y amado a un club como lo hizo el de Santiago de Compostela. Borja es el delantero de los diez últimos años gracias a sus 22 goles y a su enorme repertorio de recursos. Su forma de entender el juego hacía mejor a sus compañeros y a punto estuvo de llevar al Real Zaragoza de nuevo a Primera división tras completar una brillante segunda vuelta. Su llanto sin consuelo tras la eliminación en Play-Off mostró lo que el Zaragoza significaba para un jugador que dejó huella. Más concretamente, la de un panda.