No fue el debut soñado para Ignasi Miquel. El central, pese a no dejar malas sensaciones sobre el verde del Anxo Carro, se estrenó con el conjunto azulgrana con una dolorosa derrota. Aun así, su llegada a tierras altoaragonesas será de alta importancia tras la falta de efectivos en la zaga defensiva. Todo parece indicar que el puesto de central titular de Jorge Pulido estará acompañado por el catalán.
El último futbolista que incorporó la SD Huesca en el mercado de fichajes llega en busca de estabilidad. Con el objetivo de sumar y aportar solidez y jerarquía al esquema del míster mexicano, Ignasi Miquel buscará cumplir con nota su primera temporada en Huesca. Pese a que su estreno no fue el deseado, espera cambiar la dinámica lo antes posible para escalar puestos en la tabla clasificatoria.
Las estadísticas en el pasado choque del lunes dejaron claro del buen nivel que posee el catalán en sus botas. Con más de un 86% de acierto en sus pases, realizó cinco despejes, logró hasta cuatro duelos ganados y completó un regate. Asimismo, se apreció la claridad que maneja en la salida de balón, cuando más lo necesitó el equipo durante la primera mitad.
Tras el entrenamiento de hoy, Ignasi Miquel pasó por rueda de prensa para subrayar la ilusión del equipo por ganar el domingo al Fuenlabrada. «Con ganas de seguir mejorando y de pasar este pequeño bache en el que estamos. Al equipo lo veo mentalizado. Sólo veo ambición para el próximo partido», señalaba.
De defensa a bombero
El pasado lunes, la SD Huesca mostró numerosas carencias defensivas que facilitaron al CD Lugo la remontada final. «Los defensas somos los bomberos, los apagafuegos. Tenemos que estar preparados para cualquier cosa. Hay que mejorar, está claro. Nos meten tres goles, no debería volver a pasar», afirmaba el central. «Nos faltó mucha profundidad, de incisión, de poder ir a meter el tercero para no sufrir», manifestaba tras encajar dos tantos en el último instante de partido.
Asimismo, concluía haciendo referencia a la dura y conocida competición para él. A sus 114 partidos en la categoría de plata, el jugador catalán hablaba de la dificultad de sumar en cada partido los tres puntos, pese al gran deseo de la plantilla por remontar esta complicada situación. «El equipo es ambicioso y quiere ganar. No queremos otra cosa. Sabemos que la competición es muy dura, tenemos que competir muy bien. En los últimos minutos hacemos un bajón mental y eso no nos lo podemos permitir», comentaba.