El equipo, desolado tras el final contra el Nava. El Bada Huesca ha perdido de forma estrepitosa. Ha vuelto a poner sobre el 40×20 todas sus carencias. Tocará recuperar anímicamente al grupo que se queda muy tocado. Se esperaba este encuentro para sumar dos puntos, para reactivarse y llegar al parón invernal con fuerza. Y no. Justo todo lo contrario. Adrià Pérez miraba al infinito desde donde los porteros buscan parar los siete metros. Muchos otros en el banquillo, igual. Con la mirada perdida.
Acaba la primera vuelta de la Asobal de la peor manera posible y en los 25 años del club. Herida abierta y sal por encima. Compareció el Bada sin Joao Pinto y Asier Nieto. El luso es una baja habitual. Las lesiones lo están machacando. La baja de Asier puso el interrogante de cómo iba a afectar a la defensa 6:0 de los de Nolasco. Por los segovianos, un viejo conocido. Agustín Casado, sobrino de Alex Marcelo, con pasado en el BM Huesca al que no se adaptó y que le fichó por tres temporadas que no cumplió.
El 6:0 de Nava fue duro de inicio. Primera jugada de ataque y Seabra excluido por un placaja a OStojic. En la segunda, Baptista fue excluido por agarrar del cuello a Ostojic. Aún así Lamariano paró a Marcelo su lanzamiento desde 6 metros. Como las desgracias nunca vienen solas, D’Antino falló un 7 metros. Ni cuatro minutos habían pasado y sobre el 40×20, demasiadas cosas.
Kesselev y Seabra fortificaron el centro del 6:0 de Nava y empezaron a molestar a la primera línea de Bada. Los altoaragoneses respondieron con los centímetros y veteranía de Val para abrir hueco al lanzamiento de Ostojic y Marcelo. Cerró la defensa segoviana, paró Lamariano y hubo ataque para el 4-5 con 12 minutos de partido. Llegó vía un 7 metros de Bernabéu y agrandó la herida el mismo jugador con una contra (4-6).
Lanzamientos claros… y errados
Bada limitó sus pérdidas en ataque y subió su defensa. Un par de detalles de calidad y se volvió a meter en el partido. Falló ocasiones claras ante un Lamariano, tremendo, en esa fase del primer acto. Similar término ocurría en la otra costa, con un gran Arguillas. Los dos equipos entraron en una fase de pérdidas de balón, de ningún gobierno sobre el 40×20. La derivada era que el primero que encontrara la aguja y el hilo cosería la victoria. Para fortuna del Nava, Bada falló lanzamientos claros.
Gordo paró el reloj en el minuto 28 (9-9) para preparar el ataque y la posterior defensa ante un Bada que perdía demasiadas bolas y agigantaba la figura de Lamariano, en ese momento con un 44% de paradas. Salió justo lo contrario. Paró Arguillas y Adrià Pérez firmó el 10-9 en una contra. Agustín Casado devolvió el equilibrio al marcador en lo que fue la tónica general del primer acto. Nolasco paró el reloj para buscar en 31 segundos un ataque fructífero. Lamariano lo impidió en un lanzamiento incómodo para Camas.
Segundo acto sin acierto
El segundo acto se abrió con guión similar. El central Agustín Casado demostrando su calidad y el por qué se fijó en su día el Bada en el de Carboneras. Al parcial 0-2 de los segovianos, respondió con el mismo los altoaragoneses. El partido estaba en máxima igualdad, pero con sensaciones distintas. Se vio un Nava más equipo, mejor estructurado ante un Bada al que la ansiedad le empezó a pasar factura.
Apareció Kesselev para mandar dos misiles y poner la diferencia de +2 para los segovianos (12-14) y bola para ampliar a +3 que no aprovechó el equipo de Gordo. Llegó con un lanzamiento de Darío Ajo y Nolasco paró el reloj con 12-15 en el minuto 41. El equipo aragonés dejó su 6:0 por un 5:1 con Marcelo en el adelantado. Rodrigo Pérez falló un 7 metros y Bruno Vírseda no pudo amarrar una contra. Dos acciones que hubieran sido decisivas.
Bada volvió a chocar con los palos, con Lamariano y con su horrible primera vuelta. Descompuesto y sin suerte el partido se le empezó a ir. Carmona falló un 7 metros con 12-16 y la sólida defensa del Nava parecía agigantarse en cada ataque del Bada. Con 12-17, Nolasco paró el tiempo para buscar una reacción con menos de 15 minutos para el final. Cambió a Arguillas por Jorge Gómez y Kesselev le ‘saludó’ con un golazo.
EL Bada metió su tercer gol en el segundo acto 20 minutos después de que empezara. Para qué decir más de la defensa segoviana ni menos del ataque oscense. El partido entró en el terreno de la gloria para unos, y del suplicio para los otros. El Nava firmó una victoria con el abc del balonmano: duros atrás, correr y efectividad en el lanzamiento. Parece sencillo, pero no lo es.
Ficha técnica
Bada Huesca: Dani Arguillas (p), Carmona (2), Marcelo (4), Ostojic (1), Mota (5 -1p-), Val y Oier (1). Siete inicial. Jorge Gómez (ps), Adrià Pérez (1), Mira, Montoya, Camas (2), Benites, Sergio Pérez (1), Del Valle (1) y Malo (1).
Viveros Henol BM. Nava: Lamariano (p), Bernabéu Baeza (4), Baptista (1), Agustín Casado (4), Seabra, Kisselev (4), Ajo Martín. Siete inicial. Sánchez (ps), Edu Fernández, Bruno Vírseda, Darío Ajo (4), D’Antino (1), Rodrigo Pérez (1 -1p-), Alonso, Rosales (3), Villagrán (1).
Árbitros: Javier Álvarez y Yon Bustamante (Colegio Vasco-Navarro). Excluyeron a Del Valle por el Bada Huesca y Seabra (2) por el Nava.
Parciales cada cinco minutos: 2-1, 4-2, 5-6, 7-7, 7-8, 10-10 (descanso) 12-12, 12-14, 12-16, 13-19,16-22, 19-23 (final).
